Antes de comenzar el capítulo, quisiera disculparme como es debido ya que he tardado... ¿Meses? En actualizar.
Bueno, estoy en bachillerato y la verdad es que es tiempo de hincar codos así que no podía encontrar tiempo libre para actualizar la novela.
Pero finalmente, aquí estoy.
No pienso abandonarla, que quede claro :).
Y sin más preámbulo, el deseado capítulo:No he podido dormir en toda la noche. Aquella cosa aún seguía en mi habitación y debía admitir que me encontraba tan acojonada que ni siquiera fui capaz de subir de nuevo, o siquiera tocarlo.
Era... creo que era... una muñeca. Pero parecía tan real, que incluso dudaba de lo que había visto. Al principio parecía un cadáver de niña, pero sin duda era una simple muñeca, aunque un tanto espeluznante.
¿De dónde habría salido? ¿Qué hacía en mi cuarto? ¿Lo trajo la persona que pareció salir de mi cuarto por la ventana?
Me asusté tanto que incluso llamé a Jason.
Tras tranquilizarme, estuve a punto de quedarme de nuevo dormida en el sofá, pero una llamada me hizo abrir los ojos.
Miré el móvil; se trataba de Jason. Me sorprendió que a estas horas estuviese despierto.Descolgué.
—Lydia, ¿ocurrió algo? ¿Por qué me llamaste a esta hora? —preguntó. Parecía nervioso. Me sentí mal por haberlo preocupado.
—No, todo está bien. Te llamé porque me asusté.
—¿Te asustaste? ¿De qué?
—Alguien entró por la ventana de mi cuarto y dejó una muñeca en mi cama —respondí sincera.
Hubo unos segundos de silencio tras la línea.
—Voy para allá.
Jason se encontraba ya en mi casa.
—No debiste haber venido, estoy bien —le dije. Me sentía mal por haberle molestado a estas horas, y no pude decírselo antes debido a que me colgó rápidamente.
Jason me ignoró y subió a mi habitación. Tras habrirla, pareció quedarse de piedra.
Se acercó a la muñeca y la agarró por un brazo, subiéndola hasta su rosto.
De repente, se giró hacia mí con rapidez. Sus ojos parecían salirse de su órbita, y además estaba temblando.—¿Pudiste ver el rostro de la persona que te lo dejó aquí? —preguntó asustado.
Negué con la cabeza. Volví a mirar la muñeca y desvié la mirada al instante. Me producía tanto temor que incluso sentí un nudo en mi garganta. Tenía unos ojos y una piel tan realista, que me atemorizaba de sobremanera. Parecía estar asustada.
—Esto es basura, no te asustes —me dijo él, y bajó con la muñeca en la mano, hasta tirarla a una basura de la calle.
Le seguí.
Cuando estuve cerca de él, se giró hacia mí y me agarró por los hombros, mirándome con preocupación... demasiada preocupación.—No tengas miedo, ¿de acuerdo? Hay mucho loco suelto. Cierra bien todas tus puertas y ventanas. Si algo parecido te vuelve a ocurrir no dudes en llamarme, ¿de acuerdo? —preguntó.
Asentí con la cabeza mientras mis ojos se iban cristalizando.
¿Por qué quería llorar? Tal vez se deba al estrés que todo esto me estaba causando. Primero encuentro a una loca que desea matarme, después mi coche arde en llamas, y ahora esto. ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí? ¿No tuve ya suficiente con el encierro de mi padre y mi trabajo a media jornada? Debí haber sido un demonio en mi anterior vida para que todo esto me pasase ahora.
La primera lágrima salió, y ya era algo imparable. Jason, al verlo, simplemente me abrazó con fuerza.
Me alegra que no mr hubiese hecho alguna pregunta, porque no me encontraba en condiciones de hablar....
Al día siguiente, en clase, empecé a sentir un mal presentimiento. Me dolía el pecho y empecé a marearme. Pedí al profesor salir de clase y caminé hasta mi casa junto con una amiga llamada Elizabeth. Ella se ofreció a acompañarme por si me llegaba a caer; era una chica bastante amable.
El sonido de una ambulancia hizo que mi cabeza retumbara más aún.Cuando Elizabeth me dejó en la puerta de mi apartamento, le agradecí la ayuda y entré en él.
Me sentía tan mal que ni yo misma comprendía a qué se podía deber. Desayuné bien esta mañana, no dormí muy bien pero no me levanté cansada. Estaba bien hace unos minutos...
Al cabo de una hora, decidí ir a comprar el pan. La gente, en la panadería, parecía revolucionada. Hablaban sobre un accidente automovilístico. Entonces recordé las sirenas de la ambulancia y deduje que tal vez se trataba de aquél accidente.
La gente parecía no conocer el nombre del herido. Entonces, un escalofrío recorrió mi columna vertebral. ¿Estará bien Jason?Hice una llamada a su teléfono, y a los tres toques descolgó.
—Dios, Jason, estaba asustada. Escuché sobre un accidente y pensé que algo te habría pasado —le dije.
—Uhm, disculpe, ¿es usted familiar o amigo del señor Jason? —preguntó una voz desconocida para mí.
Fruncí mi ceño. No entendía qué estaba ocurriendo, aunque todo era demasiado obvio, pero mi cerebro no quería aceptarlo.
—S-soy su novia —respondí asustada.
—En ese caso debería saber que su novio Jason acaba de tener un accidente automovilístico...
El médico seguía hablando, pero mi cerebro no recogía esa información debido a que me encontraba en shock.
¿Jason... tuvo un accidente?

YOU ARE READING
Fix Me Up 『Jason The Toymaker』
Random«Algunos humanos parecen demonios; algunos demonios parecen ángeles». Desde el día en el que Jason entró en la cafetería, la vida de Lydia empieza a tener otro sentido. Éste siempre le está ayudando, aunque ella a veces tan sólo le de problemas; pro...