AMARTE
MADRID, 31 DE MAYO DEL 2011
Quiero que el mundo sepa que esta fascinante mujer es mía. Daría lo que fuera por lo sea en cuerpo y alma. Tenerla tan cerca, aspirar su olor, sentir su piel me estan matando.
-Christian esta bien, acepto. Iremos a Seattle para tu cumpleaños. Además asistiriréa la gala de la fundación Afrontarlos juntos. Estoy pensando volverme una de las principales benefactoras-
Cargajeo ante sus palabras, en definitiva estamos destinados.
-Ana mi madre es quién preside esa organización. Tenemos una en honor a Mia. Yo solo asistiría por compromiso, pero será un placer estar este año, claro junto a ti-
Abre los ojos con asombro al escuchar mis palabras.
-No sabía. Christian quiero presentarme como tu mujer en todos los sentidos. Quiero que me hagas tuya. Estoy segura de que lo quiero. Me gustas, te deseo y sé que ambos deseamos esto-
Si esto es un sueño no me quiero despertar.
-Anastasia, es lo que más deseo. Hacerte mía. Amarte. Sentirte. Estoy limpio no quiero usar protección. Si estas de acuerdo. Creo que no estás en algún método anticonceptivo, si no te sientas segura puedo enviar por condones-
-Podemos comprar después la pildora del día siguiente. No quiero que te protejas, quiero confiar en ti-
Ella quiere confiar en mi, entregarse a mi, puedo sentir su temor. Me levanto y cierro la puerta con cuidado para evitar posibles interrupciones. Hago mi camino de vuelta a la cama intentando no fijarme en mis manos que tiemblan un poco por lo que va a ocurrir en este momento. Estoy nervioso y esto es nuevo para mi. La encuentro de pie a lado de la cama, con las manos entrelazadas entre sí igual que sus piernas mirando a todos lados con las mejillas enrojecidas. De vez en cuando sus ojos me buscan y al encontrarme los desvia de manera timida hacia otra dirección. Doy unos pasos hacia ella controlando mi lenguaje corporal pues, lo que menos quiero, es asustarla en ese momento. Alzo la mano para acariciarle la mejilla y noto la calidez de su nerviosismo. Me deleito con la forma en que ella inclina la cabeza hacia en mi mano, cerrando los ojos, invitándome con la boca entreabierta al despertar la pasión de nuestros cuerpos. Se enternece ante mi gesto, a pesar de ello, por sus manos sé que tiembla como una hoja y quiero apaciguarla del único modo que puedo hacerlo. Por eso me inclino y rozo con mis labios los de ella, una suave caricia que la asusta antes de prepararse para el siguiente beso, Y el siguiente. Besos furtivos y rápidos suceden entre nosotros mientras muestros corazones laten al unísono y los nervios dan paso a la pasión de nuestros cuerpos y sentimientos.
Empiezo a bajar las tiras de su sexy bata de seda, dejando cada vez un poco más de su piel al descubierto, siento ganas de darle la vuelta y besarla en cada centímetro de su ardiente cuerpo. A cambio, deslizó la bata por los hombros y brazos dejando que ésta sigua su camino hacia abajo y quede desnuda fentre a mi. La beso con desespero. Me aparto de sus labios queriendo contemplarla mas no puedo ni dar un paso atrás cuando ella se acerca a mi buscando mi protección, debe sentirse demasiado expuesta para su tranquilidad en ese momento.
Noto sus intentos por soltar los botones de los ojales de mi camisa, y cómo sus temblorosas manos lidian con ello y ese gesto que hace al morderse el labio. Es tan sensual y erótico. Espero paciente a que el último botón salga, mientras lo hace le acaricio los brazos y produzco descargas en su cuerpo. Conforme mis manos se alargan con mis caricias descubro sus puntos más erógenos.
Cojo sus manos y las coloco donde ella no se atrevía, provocando que mi camisa caiga al suelo. Con mis dos manos acuno su rostro y la cubro de una nueva hornada de besos que se mueren por probar de nuevo esos labios y piel sonrosada. Toda ella sabe dulce como la miel; los gemidos que su boce emite al sentir mis caricias, una música angelical. Su toque es fuego para mi corazón.

STAI LEGGENDO
CICATRICES DEL ALMA
Fanfiction....Entonces la chica dulce y tierna cambió. Se convirtió en una mujer fría y calculadora. Con una sonrisa que devora corazones, y una mirada puede atravesar tu alma. -Te abrí mi corazón, te dí mi amor, hice de ti un mejor ser humano. Ella te dejó e...