Terror y Miedo

Canta mi nombre

Me llamo Camila, y siempre me ha gustado cantar. Desde que mi papá reconoció mi talentosa voz me dio permiso para estar en el coro escolar, haciendo presentaciones en primaria y secundaria. Mi familia se conformaba por mi papá, mi mamá, mis 3 hermanos y mis 2 hermanas, conmigo somos 8. Además, tenía un perrito llamado Bell, pues su collar tenía una campanita cuyo sonidito me gustaba mucho.

Un día mis papás salieron temprano a su trabajo, yo me despedí de mis hermanos y me fuí a la escuela. Al llegar noté que a penas estaban llegando todos, por lo que saludé a mis amigos y, cuando vi pasar al chico que me gusta, quise ir a saludarlo, y lo hubiera logrado de no ser por el grupo de chicas que siempre me molestaban. Al principio sólo me dijeron cosas sin sentido, pero cuando estaba a punto de irme una de ellas me tomó tan fuerte por el brazo que le di un puñetazo en la cara. Las demás no reaccionaron bien, por lo que me derribaron y me golpearon entre las cinco. Era la primera vez que me golpeaban, pero no me importaba, así que entré en la escuela.

Al llegar la supervisora me estaba esperando, y a su lado estaba la chica a la que golpeé. Obviamente la hipócrita no había dicho nada acerca de la golpiza que me propinó junto con sus amigas, ya que la supervisora me llamó la atención:

Supervisora: Señorita Camila, ¿me puede explicar por qué golpeó a su compañera sin razón aparente?...

Camila: Eso no es cierto, ella y su bandita me golpearon a mí. ¿Acaso no ve mi uniforme?...

Chica 1: Eso es mentira...

Supervisora: A mí no me importa quién haya empezado. Vendrán a la dirección, la directora las está esperando...

Nos llevaron a la dirección, hablaron con nosotras y nos dejaron ir a nuestras aulas. Al terminar el receso, me informaron que la directora quería verme, por lo que no tuve otra opción que ir a la dirección. Al entrar, la directora me pidió que cantara un fragmento de una canción, pues había escuchado hablar de mi talento al cantar. Cuando terminé de demostrar mi talento, la directora me aplaudió y me dijo que participaría en un evento que se llevaría a cabo en unos días en la escuela. Me emocioné mucho, pues demostraría a esas chicas idiotas que soy superior a ellas.

Al estar dirigiéndome a casa, me topé con aquellas chicas al pasar cerca de la cerrada en la que siempre se juntaban. Todas me gritaban tonterías a las que yo no prestaba atención.

Al llegar a casa mis papás y hermanos ya estaban allí, y les conté acerca de la presentación en el evento escolar, a lo que todos me felicitaron. En la noche me fuí a dormir. De repente me veía a mí misma cantando mientras asesinaba a mis acosadoras, y debo ser sincera, me producía una sensación de placer la escena.

Al día siguiente me desperté y me fuí a la escuela deprisa ya que se me había hecho tarde. Al llegar la directora me dijo que el evento sería el 6 de junio, y estábamos a 5 de junio, por lo que me emocioné aún más. Al salir de la escuela el grupito de chicas que siempre me molestaban estaba en la cerrada, pero no me dijeron nada. Al llegar a mi casa noté que ni mis hermanos ni mis papás estaban, por lo que fuí con mis amigas al centro comercial, no sin antes dejar una nota informando mi ausencia.

Primero fuimos a comer helados, después a tomar aguas frías, y cuando estabamos regresando a casa empezó a llover muy fuerte, lo peor era que yo tenía una blusa de mangas largas y no llevaba abrigo, por lo que me empapé.

Al llegar mis papás y hermanos ya estaban en casa. Mi mamá me regañó por haberme salido sin avisar. Cuando quise gritarle mi voz se fue, los sucesos de la tarde hicieron que enfermara, lo que me puso muy triste.

Me bañé, me puse ropa calientita y me fuí a dormir junto con Bell, mi mejor amigo. De nuevo tuve aquel sueño en el que asesinaba a las chicas mientras cantaba. Al despertar intenté hablar, pero mi voz sonaba horrible, aún así fuí a la escuela.

Cuando llegó el turno de mi presentación tomé el micrófono y comencé a cantar. Mi voz era tan horrible que todos se taparon los oídos. Salí corriendo en dirección a mi casa. Iba tan rápido que no noté que las chicas idiotas no estaban en la cerrada.

Al llegar a casa encontré la puerta principal abierta, por lo que supuse que mis papás ya estaban en casa. Entré, pero no vi a nadie. De repente escuché la campanita de Bell, y al llegar al lugar del ruido encontré a esas idiotas, con mi perro asfixiado, muerto.

Desconsolada, me tiré a llorarle a mi perro mientras que esas perras se reían de mí. Después de burlarse, una de ellas me pidió que cantara, y al no obedecer, me dio una patada en la garganta. Todas siguieron el ejemplo y me patearon la garganta. En un momento vi como a una de ellas se le cayó una navaja, la tomé y apuñalé a una de ellas en el pie, haciendo que la navaja lo atravesara.

Mientras ellas la levantaban, yo también me levanté y le dije:

Camila: ¿Quieres que cante? Está bien...

Mi voz era muy grave, como la de un demonio, por lo que esas chicas se asustaron:

Camila: ¿Acaso no les agrada mi voz? Que pena...

Tomé la navaja y le corté las venas a la chica cuyo pie había mutilado con anterioridad, quien murió desangrada. A otra de las chicas le corté la garganta de lado a lado. No fue difícil atravesar las espaldas de las otras dos chicas. Cuando sólo faltaba una, corrí tan rápido a ella que no me dí cuenta de que la navaja le había atravesado el estómago. Todo mientras cantaba.

Después de terminar con mi venganza, me fuí a bañar. Después de un rato tocaron a la puerta del baño, era la policía:

Oficial: Niña, sabemos que estás dentro. Abre la puerta...

Yo sólo seguía cantando, hasta que escuché la voz de mi mamá:

Mamá: ¡Hija, entrégate!...

Para cuando me dí cuenta de la presencia de mi familia, tiraron la puerta. Al ver a los oficiales caminar hacia mí, tomé la navaja, la puse en mi cuello y dije:

Camila: Adiós, los amo mucho...

Me suicidé.

Si algún día te sientes sólo y quieres compañía, canta mi nombre un 6 de junio. Te veré mientras duermes con mi navaja en la mano, me sentaré a tu lado, no te asustes, ya que te cantaré una canción con mi nueva voz.

Sólo recuerda. CANTA MI NOMBRE.
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Me tardé pero aquí está el capítulo que te prometí @CamilaRabaza.