EL AMOR DE LA ROSA ETERNA

CAPITULO 69

UNA DIFÍCIL DECISIÓN.

Terry tenía la mirada perdida, la lágrimas no podían dejar de brotar de sus hermosos ojos aguamarina había pasado una semana desde lo ocurrido con Candy, no se había atrevido a buscarla y estaba seguro que Isaac no dejaría que se acercara pues tenía motivos para ello, se llevó el antebrazo para cubrirse los ojos y continuar llorando su amargura, nunca se imaginó que tendría que enfrentarse a una situación como la que estaba viviendo, la mujer que amaba había perdido a su hijo y creía que era por su culpa, en ese instante llamaron a la puerta del habitación.

– Señor lo buscan – dijo Lucia, pero Terry no respondió – lo ve, no quiere hablar con nadie – dijo al visitante de Terry.

– Terry, soy Albert – dijo Albert mientras tocaba la puerta, se escuchó como quitaron la llave – gracias – agradeció a Lucia, esta se dirigió a las escaleras – ¿Puedo pasar? – dijo Albert, al entrar noto que las cortinas estaban abiertas y la luz de luna se filtraba en ella, Albert cerró la puerta y se acercó a donde Terry quien estaba recostado en el diván, con la mirada perdida bajo las tonalidades azulosas de la noche – Terry lo siento tanto – dijo mientras se acercaba a Terry, tomo una silla y se sentó cerca del diván.

– Gracias – dijo Terry en un hilo de voz – no creo que alguien pueda sentirlo tanto como yo – Terry al fin articulo palabra – ¿la has visto? – cuestiono Terry que seguía sin mirar a su amigo obvio que se refería a Candy.

– Sí, hoy estuve en casa de Isaac – Albert miro por la ventana como queriendo encontrar ese punto dónde Terry tenía la mirada puesta – se está recuperando – Albert aseguro.

– Albert soy un estúpido – dijo Terry mientras una lágrima salía de sus ojos.

– Tuve una charla bastante larga con Candy – Albert al fin la menciono, Terry cerro los ojos al escuchar su nombre.

- ¿Y? – Terry al fin se animó a mirarlo.

– Se recupera físicamente – Albert afirmo – pero no es fácil aceptar lo que paso con su bebe – Terry apretó los labios – Terry tienes un serio problema de carácter – aseguro.

– Albert es que fueron tantas cosas que perdí el control – Terry acepto su falta control – fueron tantas cosas juntas que no supe manejarlas – Terry comenzó a explicar – el que ella no quisiera ir a la gira conmigo, el saber que ella no me buscara y que se refugiara en Richard – Terry sintió que su corazón se comprimía – el saber que Richard canto el día de mi boda a mi esposa y saber que ella paso la noche en su departamento – Terry se sentó y se llevó las manos a la cabeza, aprisionándola pues sus pensamientos estaba tan turbios – y ahora esto – comenzó a llorar.

– Candy me conto lo que sucedió desde que te marchaste a la gira – dijo Albert, el joven actor volteó a verlo.

– Terry... - Albert hizo una pausa prolongada – Candy me dijo que vio una nota de una mujer con la cual pasaste tu cumpleaños – reprocho – que se sentía tan mal no supo a quién recurrir y que por casualidad supo que Richard estaba en Nueva York fue a buscarlo – Terry solo se limitaba a escuchar – también me dijo que Richard la convenció para ir a alcanzarte a la gira – Terry se sorprendió de ello – y que cuando llego al hotel fue a buscarte a tu habitación pero tú te estabas besando con esa chica.

- ¿Qué? – Terry no podía creer lo que escuchaba, entonces recordó la noche en que Felicia lo beso y el respondió el beso para luego humillarla, otro golpe más a su sentimiento de culpa.

– Ella regreso a Nueva York con Richard – explicaba – dice que lo vio algunas veces en casa de Isaac – Terry contenía la respiración – y que una noche lo encontró en un parque, fue el día que él tuvo que ser internado por el problema respiratorio que tuvo después del viaje a Filadelfia, es cierto que Candy cuido de él – Albert parecía adivinar los pensamientos de Terry – Candy también me dijo que la llamaste y que cuando estaba por contestarte, escucho claramente que alguien te dijo que Felicia te esperaba en la habitación – Terry recordó aquel momento, se volvió a llevar las manos a la cabeza.