AGRIDULCE ILUSION
El cielo gris hacia todo más triste, el suave golpeteo de la lluvia en las ventanas era todo lo que se escuchaba esa tarde en aquella triste y solitaria habitación, Terry ya hacia sentado en el suelo, con las rodillas flexionadas mirando como caían las gotas de lluvia, mientras que en sus ojos el agua salada no cesaba, se notaban hinchados, ardían, cuantas horas había llorado no lo sabía, sus dedos no paraban de moverse, un pequeño objeto no dejaba de girar entre ellos, Terry miro el anillo que pensaba regalarle a Candy, otra lagrima se derramo en su mejilla, no sabía que pensar si odio o tristeza, con mucho coraje aventó el anillo que callo debajo de la cama, coloco sus manos en el rostro, comenzó a llorar amargamente unos ojos verdes lo miraban desde la cama, también reflejaban tristeza. Terry abrió los ojos de golpe, se levantó rápidamente empujando las sabanas, respiraba a compasadamente, estaba sudando, aún estaba oscuro serían como las seis de mañana, casi no pudo dormir por la emoción de haber estado con ella, ya era de madrugada cuando abandono el hotel, Daniel lo esperaba dentro del auto con su gorro negro cubriéndole el rostro, Terry toco la ventanilla, se disculpó con él varias veces, este le decía que no había problema, en los ojos de Terry se veía un brillo diferente algo que su chofer percato, le dio un par de instrucciones a Daniel, cuando llegaron a casa Terry se dirigió a su habitación, Richard escucho el ruido, tampoco había podido conciliar el sueño, necesitaba contarle a Terry lo que le ocurrió en el teatro, pero Terry se vio renuente y solo le dijo "estoy cansado ya me lo platicaras mañana". Mientras Daniel despertaba a la Señora Rose algo le decía, por su parte Lucia fisgoneaba por la puerta, Daniel dijo "nos iremos temprano". Terry se dejó caer nuevamente en la cama, unos suaves golpeteos se escuchó en la puerta era la Señora Rose.
– Adelante – dijo Terry en un bostezo.
– Voy a preparar la ducha – La señora Rose se adentró en el baño.
– Gracias – aprovecho el momento para levantarse, estaba algo nervioso, la Señora Rose hizo rápido su trabajo.
– Esta lista ducha, joven – la mujer salió del cuarto de baño.
– Discúlpeme por hacerla levantar tan temprano – Terry le sonrío.
– No es ninguna molestia – la señora Rose le regreso la sonrisa.
– ¿Ya preparo lo que le pedí? – Terry pregunto ansioso.
– Si, ya está casi todo listo – le contesto tranquila.
– Ponga una botella de vino por favor, la mejor que encuentre – Terry le dio una llave era la única que no tenía la señora Rose – vaya a la cava y busque lo que le pedí – se notaba muy extraño y la mujer percato de ello.
– Claro joven – la ama de llaves lo miraba muy desconcertada – con su permiso joven. Terry se metió a la ducha, mientras el agua caía en su rostro y golpeaba suavemente su piel, sonrío y suspiro – sus pensamientos estaban en un solo lugar, después del baño se arregló, se puso un pantalón blanco, una camisa color crema idéntica a la que usaba en Londres, unos zapatos blancos, el sol ya se asomaba para cuando el termino de arreglarse, se sentía mucho calor a pesar de ser tan temprano, con mucho cuidado cerró la puerta del cuarto, bajo las escaleras, la Señora Rose ya lo esperaba en la estancia.
– ¿Está todo listo? – pregunto el joven mientras arreglaba el cuello de su camisa.
– Como lo ordeno, Daniel lo espera a fuera – la señora Rose señalo a la calle.
– Ya sabe lo que tiene que decir, si alguien pregunta por mí – le recordó Terry, esta asintió con la cabeza y se retiró, Terry estaba colocando su reloj en la muñeca, tomo las lleves de su casa, estaba a punto de salir cuando alguien le hablo.

YOU ARE READING
EL AMOR DE LA ROSA ETERNA
FanfictionAveces el destino nos juega una mala pasada, creemos que todo esta perdido, que no hay segundas oportunidades, pero... tal vez la vida nos tenga una nueva esperanza. Una joven enfermera, un actor con el corazón roto, un breve recuentro, una fugaz il...