CAPITULO 53

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ALGO AZUL, ALGO VIEJO, ALGO NUEVO Y ALGO PRESTADO.

Solo dos días faltaban para la ceremonia religiosa y parecía que nunca acabarían con los preparativos, Laureen sentía algo de tensión al igual que la madre de Terry, como siempre su amigo Cédric había sido puntual con su trabajo el vestido de novia ya estaba en la recamara de Candy esperando a que llegara el día para lucirlo, las damas que serían en esta ocasión Ane, Paty y Eugenie ya habían adquirido sus vestidos, los nervios estaban a flor de piel para todos, bueno casi para todos ya que él único que durante todo esta espera había parecido estar ausente era Terry.

- Te noto ausente hijo pasa algo - le dijo el duque y se sentó frente al sillón donde él estaba, pero Terry no contesto - ¿qué es lo que te molesta? - le pregunto.

- Nada - Terry evito mirarlo a los ojos.

- Eso ni tú lo crees - el duque esperaba que al menos una vez Terry tuviera un poco de confianza en él - tienes problemas con Candy - Terry lo miro - debí imaginarlo - enarco una ceja, tomo el periódico y lo comenzó a leer.

- Dime una cosa papá - Terry le habló, el duque le prestó atención.

-Estoy esperando - dijo el duque al ver que su hijo se había quedado callado.

- Papá estoy tan confundido - Terry se llevó las manos al rostro.

- No me digas que ya no quieres casarte - el duque pareció preocupado.

- No es eso, solo que... - Terry no termino la frase.

- Dime que pasa - él duque se sentó junto a él.

- Papá creo que Candy no ha sido sincera conmigo - parecía afirmar Terry, el duque lo observo.

- Terry aun tienes que aprender más de una mujer - dijo el duque esbozando una sonrisa, Terry lo miro interrogante - el corazón de una mujer está lleno de misterios - le explico.

- ¿Crees que debo de pasar por alto las cosas? - Cuestiono su hijo.

- Terry no creo que debas tomar a pecho algo que Candy no te haya dicho y que por tal motivo estés distanciado con ella - el duque sentía que Terry estaba exagerando las cosas, Terry quería entender a su padre.

- Aun que se por una tercera persona - al fin Terry dejo salir, el duque lo miro desconcertado.

- Terry ella es tu esposa, además te recuerdo que al igual que tu yo cometí el error de echar a perder mi relación con tu madre todo por la intrigas de tu abuelo, si en verdad amas a Candy no dudes de ella y si dudas pues no te cases - dijo el duque en tono de dureza, Terry lo miro temeroso ya que de solo pensar en no casarse con ella le daba miedo - piénsalo hijo - se puso de pie.

- Te vas - Terry no supo que más decir.

- Invite a comer a tu madre - el duque sonrío galante.

- Me alegro tanto que las cosas entre ustedes vayan bien - por esa parte Terry se sentía aliviado.

- Tu deberías de arreglar las cosas con Candy antes de la boda - expreso el duque en un tono que casi pareció una orden, Terry asintió con la cabeza mientras veía a su padre alejarse, se quedó pensativo y suspiro, se puso de pie tomo su chaqueta ya que el frío comenzaba a sentirse, tomo sus llaves y salió de su casa, Candy estaba con Annie y Paty estaban por ir a tomar un café ya que Terry le había dicho que no podría visitarla.

- Candy date prisa se hará tarde - Annie la apresuro.

- Annie no la presiones - le reclamo Paty, Stear estaba con ellas.

- Mira Paty - Stear le dijo a su esposa, Annie también volteo, ambas se quedaron maravilladas de ver a la pequeña Stephania daba sus primero pasos.

EL AMOR DE LA ROSA ETERNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora