77. Estúpido libro de amor.

8.6K 957 755
                                    

Entre un curioso aumento en la cantidad de trabajo -que sospechaba tenía que ver con Sam-, mi doble vida como Supergirl y varias noches en el bar de Sage, había pasado otra semana. Todo había transcurrido igual, seguía siendo lo mismo de siempre en cuanto a ver a mi ex, y su actual, trabajar en la oficina. Pero también había conocido a Sage y me sentía en verdad aliviada.

A pesar de lo que mis nervios iniciales suponían, todavía no leía el libro de Lena. Y es que CatCo había desarmado por completo la forma en que absorbía energía. Me pasaba una gran parte del día allí y luego la poca luz restante no era de mucha ayuda si la agotaba salvando personas o deteniendo crímenes cinco minutos después.

Muchas de las últimas noches había quedado con Sage en el bar para tomar uno que otro trago y hablar de cualquier cosa. Cuando regresaba a casa estaba exhausta y como resultado de mi mejora en el ánimo por parte de mi nueva amiga, no exactamente deseaba sumirme en una historia escrita por mi primer amor que tal vez, aunque improbablemente, estaba relacionada conmigo.

Pero esta vez estaba con ganas de relajarme en mi casa y aprovechar un poco mi soledad para investigar algunas cosas para mi artículo del día siguiente. No tardé mucho en desviar la vista al sitio en el que había dejado el libro. Seguía en el mismo lugar en la mesa junto al sillón, intacto y esperando. Pero ya no pude ignorar su existencia. Lo tomé y me deslicé en el sofá del frente con la esperanza de que mis nervios no me consumieran.

Con solo un capítulo leído me avergoncé de admitir que la manera tan delicada de Lena para escribir me gustó más de lo necesario. Y sí, no era difícil notar que las protagonistas éramos en verdad nosotras con diferentes nombres. El corazón se me aceleraba con cada párrafo de nada más pensar en que lo había escrito todo basado en nosotras.

Y es que habían cosas más que obvias. Y como había creído que pasaría, la confusión me alcanzó a mitad del libro siendo las cuatro de la mañana.

La historia iba sobre un demonio, indudablemente Lena y un ángel. No era muy complejo de notar que me había descrito a mí. Cada detalle, desde el color del cabello a los ojos y hasta la más simple e insignificante cosa, era yo.

Mientras más leía más me perdía en cada página, más necesitaba y más me lamentaba por lo que descubría. Y es que por mucho tiempo se habían odiado. Leer de propias palabras de Lena un sentimiento que se me hacía tan real a lo que ella podría haber sentido cuando me fui... No pude tolerar imaginar que Lena me podría haber odiado tanto como el demonio que la representaba.

Ver que el libro había sido publicado hace solo tres años me hizo sentir peor. Moría de ganas por saber los sentimientos reales de Lena, lo que había ocurrido al irme, la verdad. Pero que estúpida era. No merecía el beneficio de esperar nada de ella cuando yo había sido tan cobarde.

Pese a que no tenía sueño me sentía algo cansada cuando escuché el despertador sonar lejos en mi habitación. Evidentemente ya era de día y yo me había pasado leyendo toda la noche. Me faltaban tan solo tres capítulos para el final y no tenía idea de lo que haría para sobrevivir a tanta incertidumbre. No iba a negar que había amado devorar cada página del libro y necesitaba por todos los medios acabarlo, pero también tenía que irme a CatCo en treinta minutos y estaba hecha un desastre.

Mi espalda sonó mientras me levantaba del sofá y marqué el capítulo en cuestión antes de dejarlo en mi bolso. Encontraría algún momento para terminarlo.

Agradecí tener una super velocidad que me permitió bañarme más rápido de lo previsto, secarme el pelo, vestirme y prepararme en no menos de cinco minutos y eso ya era mucho hasta para mis poderes. Debí mi lentitud a la poca luz solar que había absorbido el día anterior.

My Yellow Sun; Supercorp.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora