¿Un Doctor Enamorado? |Valentino Rossi|VR46

Capítulo 12: Barcelona

La semana que pasé en mi casa estuve entretenida organizando todo para el fin de semana.

—¡No olvides llamarme si quieres que mande a alguien a buscarte! — me perseguía mi Nana mientras yo buscaba el cargador de mi teléfono en la sala de estar.

—No te preocupes — dije por enésima vez —estaré bien.

—Puse protector solar en el bolsillo más pequeño —me indicó en la maleta.

—Sólo es un fin de semana — hablé sonriente.

—Pero debes cuidarte — se preocupó y encontré mi cargador — No salgas de noche — volteé a verla y la abracé.

—Voy a estar bien, Nana — la tomé por los hombros y le di un abrazo de despedida.

—Cuídate mucho, cariño —besó mi mejilla y sonreí.

—Adiós — salí por la puerta de entrada de mi casa y visualicé el auto en que las chicas me estaban esperando.

Habíamos coincidido en ir en auto a Barcelona así sería más entretenido.
Nuria conducía y yo hiba en el lado del acompañante. Carlota y Laura iba atrás haciéndose peinados entre ellas.

—Extraño a Jorge — pensó en voz alta la conductora.

—Tranquila, ya vas a ver a tu galán —bromeó Carlota y reí.

El viaje fue tranquilo y muy divertido, cantábamos y las cámaras de nuestros celulares registraban todo. En realidad parecíamos amigas de toda la vida. No me habían mencionado quien era "La sorpresa" pero me gustaban las sorpresas así que no les pregunté nada al respecto.

Llegamos a Barcelona en un santiamén.
Nos instalamos en el departamento de Laura.
La primera noche saldríamos a un lugar que Nuria conocía así que ya pueden imaginar el  caos que había en el departamento. Zapatos, ropa y maquillaje en todas partes.

—¿Han visto mi lápiz labial? — preguntó Nuria revolviendo los cajones.

—Chicas —musitó Laura pero todas continuamos  haciendo lo mismo. —¡Chicas! —gritó y la miramos.

—¿Qué sucede? — preguntó Carlota — Se nos hace tarde, quedamos de encontrarnos en la disco con Jorge y se va a preocupar si...

—¡Eso no importa! — dijo segura.

—Ya, ¿Pasó algo con Aleix? — dudé.

—No, no. Bueno sí — pasó nerviosa sus manos por sus piernas. —Me propuso matrimonio.

—¿Qué? — dijimos Carlota, Nuria y yo al unísono.

—No me maten — alcanzó a decir y nos lanzamos sobre ella.

—¿Cómo? — dije y acomodé mi vestido.

—¿Dónde? —preguntó Carlota sentándose bien.

—¿Cuándo? —chilló Nuria dando pequeños saltitos en el mismo lugar.

—Fue muy romántico, en una cena. En su casa. Hace 6 meses —respondió una por una nuestras preguntas.

—¿6 meses? — gritó Laura —¿Qué esperabas para decirnos?

—Era un secreto, nuestras familias eran las únicas que lo sabían —explicó.

—Pol lo sabía, ¡Y no me dijo! — dijo Carlota.

—¿Y cuándo es la boda?  — pregunté entusiasmada.

—Cuando pase el gran premio de Argentina — comentó.