RECUÉRDAME [WARIAM]

II-INSTINTOS ASESINOS

- AMIGAAAAAA, por fin estás aquí.- me abrazo con todas sus fuerzas, algún día me iba a matar. Ellaaaaaa es más lenta que un sapoconcho.- y se empezó a reír solita.
- Gilipollas.- rodeé los ojos y al instante me empecé a reír con ella.- Oye amiga, te he echado de menos, ya nadie me pide masajes como tú hacías.
- Bueno, créeme que eso está noche va a cambiar, que aún tengo la cadera jodida y es que ahora con Pablo me...- su móvil empezó a sonar y cuando vi quien era deje de reírme como lo estaba haciendo 'mimi amiga rubia' le estaba llamando.

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Tenía mucho miedo, no creía que la gallega me hubiera hecho eso, la gran hija puta de Miriam me había hecho la envolvente. Estaba paralizada ya que en media hora iba a volverla a ver, a ella, a Mimi. Estaba tan nerviosa que quería huir a arriba del monte y empezar a llevar una vida en comunidad con las cabras. Miriam se las había arreglado para reunirnos a Mimi y a mí sin que supiéramos nada, quería que arregláramos de las y dejar las gilipolleces, putas del demonio.

— Si, mira, en media hora bajo a la plaza del pueblo y te recojo.- colgó y me miró como una leona que acababa de cazar a su presa.

— Esto es traicion, hija de puta, vas a crear una tensión innecesaria en tu casa.- Me llevé las manos a la cara porque estaba poniéndome muy nerviosa y no sabía que hacer para calmarme.

— Ana, estas deseando verla, te da miedo aceptar ciertas cosas, créeme que lo he hecho por tu beneficio, algún día me lo agradecerás. Venga, que tenemos que ir a la plaza.- Cogió su chaqueta y abrió la puerta sujetándola para que yo saliera.

— Yo no voy a ir, tengo que desahacer la maleta y...- Miriam me interrumpió. — Ana, lo puedes hacer en otro momento, hazlo y no seas niñata neno. No puedes evitar esto ya y que más se te da verla media hora antes o media hora después, tenéis que hablar de una puta vez y resolver las cosas, no quiero malos rollos en toda la gira, que tengo que soportaros yo.

Durante todo el camino hacia aquella plaza no hablé con Miriam, estaba demasiado enfadada con ella, me sentía presionada a encontrarme con ella, no entendía porque la gallega me había engañado para ir allí y supuestamente ''descansar y desconectarme de los problemas''. Me metí a Instagram y empecé a ver fotos, Raoul y Agoney subieron una foto juntos, que preciosos eran juntos. Todos sabíamos que estaban juntos aunque no quisieran que notáramos nada, esas miradas y ciertas maneras de mostrar cariño no se le dan a un amigo. Si yo hubiera sido valiente tal vez ahora mismo podría disfrutar tanto como Raoul con Agoney, pero no tenia el suficiente valor para enfrentarme a él. Notaba que la nuestra relación no era la misma que hace unos años, era fría y no tenía los mismos sentimientos hacia Jadel desde hace mucho tiempo. Pero, cuando la miraba a ella sentía un fuego interior que me quemaba; cada abrazo, cada caricia hacia que la quisiera más cerca. Era tentador, pero tenía que pensar en los pros y en los contras, y justo cuando salí mi novio me había dado una bronca monumental con que si ahora era bollera y que si le engañaba con aquella tía nos iba a afectar a la carrera de los dos y no tirara nuestra relación de dos años por una rubia que estaba buena.

Pero era inevitable sentir lo que sentía por ella.

— Carallo Ana quieres hablarme, estas empanada, neno.- Miriam me despertó de mis fantasías

— Solo estaba pensando en mis cosas.- Me excuse como pude y suspiré muy levemente.

— Todo va a salir bien y si algo sale mal le mando a la caseta del perro y tú con una correa atada a la cama de mi hermano.- me guiñó un ojo justo después de decir aquello.

— Pues no estaría mal que me mandes a dormir con tu....- Justo antes descanse la frase me interrumpió.

— Oye, puta del demonio, como intentes ligar con mi hermano te meto un placaje que te quedas agonizando por tu vida en el suelo, que tú tienes a la rubia afrodisíaca o al cafeto malvado, cálmate ya.- Se notaba a distancia que a Miriam no le gustaba nada Jadel, pero lo decía con ese tono tan suyo que hasta me hacía gracia.— Bueno pues la señorita ya puede bajar del cochecito, que hemos llegado al destino.- Baje de un pequeño saltito y no me había dado cuenta de que justo al lado había una farola, así que me comí la hostia de mi vida.

— Coño, Miriam ayúdame a levantarme que no puedo levantarme.- me había hecho daño en la rodilla y ahora la puta me estaba doliendo que te cagas.

— Es que creía que ahora te gustaba dormir en el suelo como los perroflauta.- Dijo reproduciendo una frase de La Llamada.— Tantas veces te has caído... y con mi mano tú te vuelves a levantar.- empezó a reírse sola como una desquiciada pero me dio la mano y me levante.

— Eres una perra mala, gilipollas, y date prisa que eras tú la que tenía prisa.- Puse los ojos en blanco porque mi amiga no paraba de hacer colas de lo torpe que era, que si, que era muy torpe pero no me gustaba que se rieran todo el rato de mí.

— Ellaaaaaaaaa que no acepta broma.- se rió e inmediatamente después me dio un abrazo de oso como ella sola daba, realmente no me podía enfadar con ella.

Seguimos caminando y llegamos a una plaza que parecía de la Edad Media, había un mercado donde vendía un montón de hortalizas y frutas típicas de la comarca, vendían una gran cantidad de objetos artesanales. La plaza tenía una torre con una campaña justo en su planta superior, además esa torre era el reloj del pueblo. Todas las casas eran de piedra y parecía que nos habíamos transportado a otra época, lejos de la vida inquieta y estresante de Madrid.

— La rubia llega tarde, odio tener que esperar.- Rechistó Miriam al ver que llegaba diez minutos tarde.

Miriam y yo estábamos hablando sobre la gira de OT cuando vinieron dos señoras mayores para que le firmáramos algo para sus nietos, que eran grandes fans de nosotras dos, encantadas nosotros firmamos lo que pidieron y fue entonces cuando un taxi paro justo enfrente de nosotras. Llevaba gafas de sol y ese abrigo negra que tan bien le quedaba, llevaba un aguacate en la boca y se le cayó al suelo en cuanto me vio. Miriam fue corriendo a abrazarla ya que ella era así.

— MIRIAM DOS ESTOY MUY FELIZ DE QUE ESTÉS EN MIS TIERRAS.- Le abrazo de tal forma que Mimi puso una cara de que le faltaba el aire y yo no pude evitar reírme por la situación.

— MIRIAM UNO GRACIAS POR INVITARME PERO ME VAS A MATAR ALGÚN DÍA DE ESTO.- Miriam río por el comentario de Mimi y le ayudó con la maleta. Mierda, ya estaban viniendo para mi dirección y no sabía que decirle, no sabía cual iba a ser su reacción ya que no nos habíamos dirigido la palabra después de cantar nuestro famoso Albarracin. Estaba sudando tanto que parecía una fuente, y se plantó delante de mí e hizo lo que me encantaba de ella, su cariño y tirar a la mierda el orgullo.

— Hola Ana Banana.- Me dio un abrazo que calmó todo mi miedo a encontrarme con ella, ahora sabía que no estaba enfadada y apoyé mi cabeza en su hombro. Ahí estaba toda la tranquilidad que no encontraba con Jadel, toda la felicidad que solo sentía cuando estaba con ella.

— Hola Mimi.- Sonríe como una niña pequeña porque no podía evitar sonreír así cuando estaba con ella. Ante Mimi era la persona más débil del mundo y mi orgullo hacía la maleta y se iba a la mierda.

HOooOoOola, perdonad por hacer los capítulos tan cortos pero llevaba mucho tiempo sin escribir y bueno, ahora lo retomé. ¿Qué os parecen los dos primeros capítulos? podéis decirme que os parece por mensaje privado en mi twitter @mimipoems ya me diréis. Además quiero deciros que la FANFIC no se va a centrar en Warmi, que vais a tener mucho más contenido y va a haber un drama de la hostia