Las Crónicas de Narnia: Cair Paravel Vs Hogwarts ¿Quién vencerá?

Capitulo 13: La Reina de Veronix (Parte 1)

Ethel, actual reina de Veronix, no tenía ni la más mínima idea del terrible peligro que estaba sufriendo Narnia en esos momentos. Y de haberlo sabido, puedes apostar a que habría salido corriendo en su ayuda aún sin que nadie se lo hubiese pedido. Pero como digo, no tenía ni idea. Y no solo porque nadie la hubiese informado, sino porque tenía sus propios asuntos en la cabeza que no la dejaban ni un momento de respiro.

Si bien es verdad que los problemas en Veronix se habían calmado con su subida al trono y el pueblo estaba feliz con su nueva soberana, el reino había estado mucho tiempo sin reyes y por tanto había pasado un año muy ajetreado organizando todo, visitando a todo el mundo y con esos desfiles que los reyes a veces tienen que hacer para que los súbditos simplemente les vean y puedan demostrarles su alegría y devoción.

Obviamente, Ethel no se enfrentaba sola a todas estas tareas sino que había formado un consejo con hombres y mujeres de su confianza para que la ayudaran y había ascendido a Marlock de jefe de su guardia a su mano derecha como consejero principal.

Por desgracia en los últimos días, dicho consejo le había dado más quebraderos de cabeza que otra cosa. Y Ethel, que todavía se sentía un poco insegura en su papel de reina, les dejaba hablar y hablar en lugar de mandarles callar sin más (como habría hecho otro rey), lo que tenía como consecuencia que empezaba a sumirse en un estado de aburrimiento y ensimismamiento muy preocupante.

―¿Majestad? ¿Majestad? ―La voz trajo de vuelta a Ethel que llevaba un rato mirando por la ventana de la habitación. Se había vuelto a distraer con pensamientos que no debería tener, pero sacudió la cabeza y miró a su consejero―, ¿me estáis escuchando?

―Pues claro que si ―respondió ella intentando sonar convincente. Se sentó más derecha y adoptó una expresión seria― ¿Me podrías repetir esto que me estabas contando, por favor? ―Deslizó las manos por la mesa, con los dedos entrelazados y añadió―: Desde el principio.

Marlock arqueó las cejas y colocó los papeles que tenía delante de él.

―Os decía que mañana tenéis una reunión con el consejo de Veronix ―Ethel asintió y se aseguró de recordarlo, pero Marlock torció la cabeza pues no había terminado―. Lord Efestian tiene un especial interés en tratar con vos ese tema de nuevo...

Ethel dio un respingo.

―¿Otra vez? ―preguntó. Intentó no suspirar con fastidio aunque es lo que deseaba hacer. Aun estando con alguien de su máxima confianza había ciertos gestos que una reina no puede hacer delante de nadie― ¿Cuántos son esta vez?

―Han llegado al menos... cinco más.

―Y eso hace un total de...

―Veinte, majestad ―Calculó Marlock al instante. La reina asintió y arrugó un poco la nariz―. Veinte príncipes y nobles de distintos lugares solicitan su permiso para que les permita visitarla pronto.

Veinte príncipes... ¿De dónde salían tantos? Ethel sintió los nervios agarrotándole los hombros e hizo un leve movimiento con el cuello tratando de aliviarlo.

―Son demasiados ―Fue lo único que se le ocurrió decir.

―Yo os aconsejaría que no los citarais a todos a la vez, alteza.

¡Por supuesto que no pensaba traerlos a Palacio a todos a la vez! Y Marlock lo sabía, porque lo contrario habría sido una absurdez y él sabía muy bien que su reina no era ninguna absurda.

―Majestad... ―le dijo en voz baja. Usó un tono de voz mucho más cálido que cuando hablaban de asuntos oficiales, y solo cuando nadie más estaba delante, así que Ethel supuso que iba a decirle algo importante―, Lord Efestian no es el único miembro del consejo que opina que va siendo hora de que conozcáis príncipes. Es posible que más de uno se ponga de su parte mañana porque habéis retrasado esas visitas durante bastante tiempo.