Ginger Boy - Ed Sheeran

Penúltimo Cap.

        Hello, It's me. Vale ya paro. Hola, ¿Se lo pueden creer? Yo subiendo cap, guau. Hahaha vale, el punto es que cuando termines de leer este sensual cap leas lo que hay al final.

Ahora si, disfruta :)

        Estábamos Ed y yo durmiendo cuando sonó el teléfono, abrí los ojos sobresaltada ya que son apenas las 4 de la madrugada y el volumen del móvil suena demasiado alto. Intenté incorporarme como pude debido a esta barriga de 8 meses y medio que no me deja hacer casi nada, pero al fin cogí el móvil.

        -Si? -bostezé-.

        -¡__________! -gritó Louis, de fondo se oían quejidos-.

        -¿Louis qué pasa? -me levanté-.

        -Estoy en el hospital, Tere está de parto __________ -me tapé la boca para no soltar un grito-.

        -Vale, tranquilo, en una media hora estamos allí -colgué-.

        Qué emoción por fin nacerá la pequeña Lauren, qué ganas de verla, bueno y a mi mini Edward, que en un mes lo tendremos por fin.

        Me acerqué al armario y me puse un chándal gris, unas adidas y un hoodie negro, tenía que despertar a Ed y así poder irnos cuanto antes, pero esta era la parte más difícil, despertarle.

        -Amor -dije en su oído- Ed -puse una mano en su hombro y lo moví- Ed cariño -nada, estaba tieso- Edward - le di un beso en la mejilla y sé movió un poco abriendo los ojos- amor.

        - ¿Hmm? -Se giró hacia mi con los ojos cerrados-.

        -Amor Tere está de parto, está en el hospital, hoy nacerá Lauren -abrió los ojos y dio un brinco en la cama-.

        -¿EN SERIO? ¡VAMOS AMOR, HAY QUE VESRIRSE LLEGAREMOS TARDE! -le miré levantando una ceja-.

No sé si pegarle o matarlo.

        -¿Me dices que llegaremos tarde cuando yo ya estoy lista y llevo unos 10 minutos intentando despertarte? -Ed se rió y se acercó a darme un beso-.

        -Perdón, son los nervios, y eso que no es nuestro bebé -dijo metiendo una pierna en el vaquero- joder estoy muy nervioso -se abrochó el cinturón y corrió a por una camiseta-.

        -Relájate Ginger, Tere es fuerte y los chicos están en camino seguro -Ed volvió a entrar al cuarto ya vestido y me cogió de la mano-.

        -¿Tienes todo? -asentí- pues listo, nos vamos-.

        Bajé despacio las escaleras y cuando llegué a la planta de abajo entré en el salón y cogí la cesta violeta con pañales, muñecos, chupas, ropa y productos para el bebé que había ido a comprar con Ed hace unas semanas por el parto de Tere. Cuando la cogí Ed me la quitó de las manos con cara de cabreo.

        -__________ no puedes coger peso, es un riesgo para el bebé y para ti -su semblante cambió a uno dulce y vino hacia mi dejando la cesta en la mesa de la cocina- si os pasara algo a ti o al bebé no sé que haría -juntó su frente con la mía y me besó-.

        -Perdón, tienes razón -me miró dulce y me volvió a besar-.

        Nos metimos en el coche para ir al hospital, por el camino Ed habló un poco sobre el tema de cómo cambiar los pañales haciendo que riera por la cara que ponía al hablar de eso, y la verdad el camino se me hizo corto.
Aparcó en la plaza de embarazadas que es frente a la puerta para mi felicidad y vi a lo lejos el coche de Liam y el de Niall.