Capítulo 27: Agua III

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(nota del traductor:dejo las notas del autor)

¡Yosh! Digi-kun no es dueño de Naruto-kun, por eso se ha ganado el derecho de ser mi eterno rival, ¡nuestras llamas de juventud se volverán doblemente brillantes!

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Sabio

"Todas las guerras son guerras civiles, porque todos los hombres son hermanos". - Francois Fenelon

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Fue unos días después del incidente que involucró a Kiri Shinobi y las fuerzas rebeldes, y Naruto estaba sentado en una pequeña tienda de campaña cerca del centro de un gran campamento. Cuando llegaron al campamento rebelde, Naruto se sorprendió cuando se les permitió entrar, pensó que se habrían visto obligados a irse en caso de que fueran espías. Aparentemente, el capitán del campamento, un hombre mayor con cabello largo y castaño oscuro llamado Tsurugi, necesitaba que se quedaran hasta que su comandante viniera y les hiciera algunas preguntas.

Naturalmente, Naruto y Shizuku habían estado preocupados por esto, Fuu siendo su yo habitual simplemente se mantuvo impasible. Por supuesto, rápidamente se les aseguró que si no tenían mala voluntad hacia los rebeldes, ya que su rescate del Kunoichi que encontraron había demostrado, entonces no pasaría nada malo. Por supuesto, eso no alivió particularmente sus preocupaciones; Shinobi no era conocido por ser la gente más honesta, incluso si Naruto encontraba que sus metas eran honorables.

Descubrió que este era uno de los muchos campamentos escondidos en las regiones disputadas de Mizu no Kuni, y que incluso había algunos en las profundidades de los territorios controlados por Kiri. Por supuesto, no fue tan tonto como para preguntar dónde estaban estos otros campamentos, eso sería demasiado sospechoso; aunque eso no significaba que no tuviera curiosidad. Supuso que los campamentos en sí estaban ocultos por una combinación de varios Genjutsu, trampas y neblinas, que parecían funcionar a favor y en desventaja de ambos bandos.

Técnicamente, el grupo estaba cautivo por los rebeldes, pero no todo era malo; no fueron mal tratados, aunque obviamente el Shinobi fue el primero. También había sido una excelente oportunidad para hablar con varios Shinobi, especialmente sobre Jutsu de agua y afinidades. A Shizuku le encantó especialmente la ayuda extra de Shinobi, que estaba feliz de ayudar a una niña con algo tan mundano como una afinidad con el agua; Naruto pensó que era un buen escape de la lucha. Tenía sentido que las afinidades de entrenamiento le recordaran a los Shinobi más veteranos y veteranos de su juventud, antes de toda la guerra y el derramamiento de sangre.

Bajo su guía, Shizuku había dado pasos agigantados con la segunda etapa, creando un remolino con nada más que la manipulación del agua Chakra. Naruto también había comenzado a practicar su propia técnica de agua, una vez más notando que se sentía más fácil de alguna manera con cada elemento que pasaba dominaba. Se preguntó si al aislar y controlar cada una de sus diversas afinidades se simplificaba el acceso al resto; tenía sentido cuando pensaba en ello. Él sonrió ante la idea; recordando su objetivo original de comprender Chakra hace mucho tiempo.

Habían pasado casi un año y tres meses desde que abandonó el Templo del Fuego, Naruto tenía doce años y lo había sido durante dos meses. Eso era seguro, como era obvio para todos los demás; Los diciembre eran extremadamente fríos en Mizu no Kuni, especialmente para aquellos que no eran nativos. Afortunadamente, cuanto más avanzaban hacia el sur, más suave se hacía el clima; pero eso no detuvo las finas capas de escarcha que cubrían el suelo cada mañana. La lluvia torrencial y perpetua tampoco ayudaba demasiado, razón por la cual Naruto sonrió mientras Shizuku se agachaba bajo la solapa de la tienda.

SabioWhere stories live. Discover now