Imagínalo

137 60 4
                                    


Imagina,
imagina que esta noche tú y yo
nos embestimos para despertar
al lado.

Imagina,
imagina que los dos nos buscamos
sin la urgencia de encontrar el orgasmo
sino de encontrar el amor
dentro del otro.

Sólo imagínalo.

Imagina,
sí, que el amor está escrito en los cuerpos
desnudos que hay que descifrar tocándose
para llegar al alma.
Una y otra vez.
Sin prisa.

Imagínanos
buscando solamente un corazón
con quién dormir cada noche de nuevo.
Y aprendernos, revolcados, desnudos,
indefensos en los brazos del otro,
riendo,
esta noche de julio
cerca del río.

Sólo imagínalo.

Relicario de aullidos disecadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora