Perdidos en el bosque Sasusaku

Capítulo 16: Un hogar vacío

- Te he preparado tu comida favorita- expresó mi "madre" mientras en su mano sostenía un plato con ankos. En otras circunstancias yo posiblemente estuviera completa e inigualablemente feliz, pero no ahora.
Únicamente le dedique una fantasmal sonrisa que fue lo suficiente para que ella no notará que algo raro andaba en mí. Me asentó el plato en la mesa en donde yo había tomado asiento. Ella se sentó al frente.

- Me han informado en la Academia que por la situación en la que te viste en vuelta con el hijo del Jefe de la Policía, les permitirán tomarse un receso de las clases, esto sin afectar su situación académica. Hija yo creo que deberías quedarte en casa, has estado fuera unos días y consideró que eso te afectó en algo... Yo...

-Estoy bien. Mañana iré a la academia, tengo unos asuntos que debo resolver lo antes posible, así que... No vuelvas a decirme que hacer-. La interrumpí, mi madre me miro perpleja sin decir nada. Tras unos segundos agregué:
-Gracias por la comida, estoy muy cansada y quiero descansar un rato, así que por favor le pido que no me moleste -. Me levanté de la mesa y cuando estuve a nada de abandonar el  comedor, la voz de mi madre me hizo detener mi paso.

-¿Segura qué estás bien?

-Tal vez soy yo la que debería preguntar eso.

-¿a qué te refieres, hija?- pregunto confusa.

-¡BASTA DE LLAMARME ASÍ! - vocifere, mi madre pareció dar un respingo. Sin embargo, ella no dijo nada sino continuo mirándome con esos ojos llenos de sorpresa, de completa confusión, esperando que yo digiera algo, alguna palabra.

-¿puedo preguntarte algo, madre?-. No respondió a mi pregunta.
-¿aún continúas teniendo las pesadillas de siempre?-. Agregué.

-No entiendo a dónde quieres llegar. Siempre las he tenido, aumentaron mientras tú no estuviste en casa.

- Ya veo-. Masaje mi cabeza con la yema de mis dedos, el dolor era cada vez más intenso. -Lo siento, he tenido un cansado viaje, me iré a descansar ahora.
Mi madre aún pasmada únicamente se limitó a asentir con la cabeza y a mirar como yo desaparecía por completo de su vista.

Tal vez, soy despreciable, cruel, ruin porque ¿qué culpa tenía esa mujer? Ella igual había sido víctima de los Uchiha, había sido engañada como yo, apesar de todo ella ha actuado como una madre a lo largo de estos años, no era justo que yo la tratará así... pero, es mucho más injusto que yo continúe viviendo está farsa... ¿Qué es lo que debo hacer, papá? ¿Dónde estás ahora?, ¿Tú si has encontrado a mamá?... ¿Tú si estás siendo feliz?, múltiples lágrimas invadieron mis ojos...
-Te extraño, papá-. Fue lo último que dije hasta caer a los brazos de Morfeo...

-Devuelvemelo, devuelvemelo-. Continuaba gritando una voz femenina dentro de mis sueños, gritaba desesperadamente, como si le hubieran arrebatado lo más importante de su vida, era un grito desgarrador que te partía el alma con sólo escucharlo, estaba sufriendo.
Fue ahí cuando abrí los ojos y aquella voz emano del cuarto de mi madre.
-Devuelvemelo, devuelvemelo- grito nuevamente entre sueños y es cuando supe por primera vez el significado de las pesadillas que mamá había tenido a lo largo de los años, ella quería... su verdadera vida de vuelta....

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Los rayos del sol se colaron por mi ventana haciéndome despertar por la intensa luz que había invadido mi habitación, miré el reloj y aún marcaba una buena hora para llegar a tiempo a la academia, me arregle y salí dispuesta a irme. Mi madre me detuvo en el camino.

-Que tengas un buen día-. Fue lo único que dijo.

-Regresare pronto a casa.
Formule y cerré la puerta principal de mi casa.