Alto, delgado, blanco de cabello corto negro y una leve barba que delineaba su perfecto mentón, así era Ricardo el perfecto novio del amor de mi vida, un profesor colega de ella, creo que impartía matemáticas, la verdad es que no estoy muy segura.
Lo único de lo que estaba segura era de que él me la había quitado después de lo mucho que me costo que fuera mía él se la llevo como si nada.
Habían pasado mas de una semana desde que Elena decidió dejarme por él, no me escribía, no contesto ni mis llamadas ni mis mensajes y apenas y me saludaba si se me ocurría ir a su casa con Cris. Que era el único lugar al que me daban ganas de ir, tan solo para poderla ver aunque fuera de lejos con el idiota ese que tenía embobada a toda la familia de Elena, pero honestamente lo único a lo que me había dedicado era a ir como zombie al colegio y a llorar durante toda la noche, y algunas madrugadas cuando ya no tenía mas lagrimas, caminaba la cuadra y media hasta casa de Elena, imaginando que nada había cambiado y que al llegar podría subir hasta su ventada donde ella me estaría esperando con los brazos abiertos pero lo cierto es que lo único que podía hacer era pararme desde el otro lado de la calle a mirar la casa e imaginar una reconciliación que nunca llegaría. Ese dolor me estaba matando y de no ser por que a esa altura ya era imposible perder el año de colegio creo que hubiera reprobado, porque no tenía mente para nada excepto para preguntarme que había echo mal, recreaba nuestros momentos juntas tratando de encontrar el motivo, que fue lo que hice para que se aburriera de mi y se enamorara de alguien mas.
una de esas tantas madrugadas en las que solía torturarme escuchando una y otra vez la misma canción frente a aquella casa que ya me sabia de memoria, sentí el movimiento brusco que me arranco los audífonos de mis oídos apagando la voz de Vanesa Martin que me reiteraba que ya van nueve días tratando de hacer una vida sin ella.
Evidentemente era Lexi la única persona que yo conocía capaz de andar despierta aun a esas horas por la calle.
-¿Lu que haces aquí? y no me salgas con eso de que estas caminando porque vengo viéndote hace dos cuadras y tu solo estas aquí sin hacer nada.
-Yo... bueno solo... nada no hago nada. Solo pasaba por acá y me distraje pero no hago nada.
-¿Porque no me dices la verdad?¿Acaso crees que no me doy cuenta?
-¿De que hablas?
-¿En serio crees que no se que estas aquí por ella? (Dijo mientras se subía por la tapia de la casa que estaba junto a nosotras)
-¿Que haces Lexi porque te subes ahí?
-ven acompáñame, que nadie nos va a ver a esta hora todos duermen.
Escalé por la tapia hasta sentarme junto a ella entre las ramas de un árbol de sauco que se extendía desde adentro de aquella casa ,unos metros por encima de la tapia. Desde ahí podía ver al frente la casa de mi amor sin temor a que nadie me viera a mi, como no se me había ocurrido antes. Me perdí en mis pensamientos un segundo hasta que Lexi insistió.
-y entonces ¿me vas a contar?
-¿Que te cuente que?
-¿Que paso con la hermana de Cris?
-¿De que hablas? no te entiendo
Acaso Lex sabía algo, lo intuía había visto algo o solo lo imaginaba? mil preguntas saltaron a mi cabeza, hasta que después de un pequeño silencio contesto.
-Lu en serio crees que nadie se iba a dar cuenta, se nota en la forma en que la miras como le hablas, como te habla ella a ti y esas salidas misteriosas tuyas. Es obvio que te gusta.
yo solo le esquive la mirada y me quede callada, así que ella continuo.
-Puedes estar tranquila que yo no voy a decir nada a nadie, hace mucho se que algo pasa entre ustedes, pero si no dije nada es por ti, porque no hay nada que desee mas en este mundo que verte feliz, pero ahora que Elena salió con esa estupidez de su novio me duele mucho ver que esto te esta matando y que ni siquiera tienes a nadie con quien hablarlo.
-Lex yo no se que decirte.
-¿la quieres mucho no es cierto?
-con toda el alma.
-¿y ese novio de ella a que se debe? ¿lo quiere o solo es para aparentar lo que no es?
-Ella dice que si lo quiere.
-Lu entonces ¿ que haces aquí sufriendo por ella?
Tal vez tenía razón, pero que podía yo hacer si es que en el corazón no se manda y si la había querido desde que era una niña sin que hubiera pasado nada, ahora que la sentí mía aunque fuera por poco tiempo como se suponía que tratara de olvidarla.
-Pues no se Lex no es tan fácil de explicar.
-tu mereces alguien que te quiera, solo a ti y que no te cambie por nadie.
-Pero si es que yo no quiero a nadie mas que a ella.
- Abre los ojos Lu. ella no te quiere y tu tienes un montón de personas que darían lo que fuera porque las volvieras a ver.
-Jaja un montón de personas, si es que aparte de Juan David yo no se nadie mas que quiera algo conmigo, y tu misma me has dicho que él no es mas que un niño inmaduro.
En ese momento se me acerco despacio, sujeto mi rostro con su mano y me dio un pequeño y corto beso en los labios, fue algo muy tierno, nada comparado con la primera vez que ella me beso, me asombro mucho que lo hiciera realmente no lo esperaba, se separo y se me quedo viendo por unos segundos, hasta que por fin hablo y dijo.
- Parece que no te das cuenta que eres la cosa mas linda del mundo.
Espero que les guste el capitulo, si les gusta o no
háganmelo saber, gracias a todas por su apoyo
y por el tiempo que dedican a leerme.

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una historia que merece ser contada
RomanceLucia es una joven que desde niña se enamora perdidamente de la hermana mayor de su mejor amiga, una mujer que para ella es inalcanzable sin embargo la vida y el destino le tiene muchos planes que ella nunca imagino.