CELOPAN
El día de la boda llego, todos los invitados estábamos en un gran salón de fiesta muy hermoso así con un jardín lleno de plantas y flores.
Los invitados eran varios y todos vestidos con ropa formal, buena música y un choque cultural muy notorio, la familia del novio de mi prima, de Guadalajara en México.
Aun así yo y Zeus nos la pasamos muy bien -Zeus que te vas a caer!- ambos estábamos en unos columpios del jardín, yo empujaba a Zeus el cual pedía ir más arriba -Mas! empújame más fuerte David!-
Ambos sonreíamos muy felices aunque si llegase a caerse se daría una hostia que nunca olvidaría -Zeus que puedes salir volando!- el sonreía feliz, aprecia que no le importaba caer del columpio, pero que narices, era aun así divertido.
Las flores soltaban sus pétalos que volaban a nuestro alrededor, aquellas volaban por el rostro de Zeus, el cual sonreía y la luz del sol lo iluminaba en aquel jardín hermoso.
Pero no tan hermoso como Zeus, de verdad que se veía guapo sonriendo y con ese traje formal, me encantaba, estaba muy orgulloso del guapo chico que tenía conmigo, lindo por fuera y por dentro.
-David!- enseguida escuche la voz de mi prima la cual venia hacia nosotros con su hermoso vestido de novia, la había evitado mucho más que nada porque no quería que su novio nos viera muy juntos a Zeus y a mí.
ZEUS
-Ha!!!!!!!-
Salí volando del columpio y fui a dar a un arbusto lleno de flores y mariposas revoloteando alrededor de él.
--Ha!!! No! David!- le grite -Zeus! es que eres tonto!- él fue conmigo y me ayudo a levantarme, todavía seguía sonriendo -Ha, mi cabeza, me duele, peor fue divertido- David me reviso con mucho cariño para ver si no me había herido.
-Zeus te lo dije, eres tonto- Me ayudo a quitarme los pétalos y hojas de mi traje como si fuera un niño pequeño -Deja de regañarme David-
Enseguida fueron también la novia y su homofobo novio -Zeus te encuentras bien?- me decía la novia -Si, solo tengo un golpecito, peor me lo he buscado-.
David encontré un golpecito en mi cabeza -Es muy leve, a ver si ya te pones en paz- era tan lindo cuando se preocupaba por mí, lo mire y me acerque para darle un besito en agradecimiento pero él se quitó y me ayudo a pararme -Bueno, vamos a la mesa a platicar con la familia- dijo David, al parecer no quería que vieran que eras novios, todavía sentí un poco de inseguridad.
Así que hay estábamos, sentados en una mesa, con mi prima y su novio, los recién casados, también la familia del novio, una familia muy divertida y risueña.
-David en unos momentos algunos de los familiares de la novia y novio dirán unas palabras muy especiales, quieres ser uno de ellos?-
CELOPAN
-Claro que sí!- vaya detalle, era muy hermoso desearle a alguien una buena vida de esposos.
-Y David, cierto?- se dirigió a mí el novio -que edad tienes?- yo era el hijo mayor de la familia al menos de mis padres -19- le conteste sin rodeos -Vaya, de seguro ya tendrás una linda novia, me ha dicho mi hermosa novia que eres famoso en internet, de seguro tienes hermosas admiradoras-.
La situación se tornó incómoda para mí y Zeus, que tenía que decir en esta situación? era lo que temíamos, no quería mentir pero tampoco quería ocasionar una disputa.
-Sí, tengo muchas admiradoras y son lindas- me limite solo responder lo esencial, aunque no me agradaba esconder a Zeus, no, no podía permitirlo, quería presentarlo, a mi novio, a mi Zeus.
-De hecho si, si tengo pareja- dije con decisión y seguridad, Zeus aun lado de mi me miro esperando a que lo dijera.
-Y ahora unas palabras! para los novios!!!-
Dijeron atreves del micrófono interrumpiéndome una invitada, sería la madre del novio, el cual se llamaba Rodrigo, el micrófono paso a mis manos, ya que Anastasia le hizo indicaciones para que me pasaran el micrófono, lo tome y me puse de pie un poco nervioso.
Mire a mi prima, con ese vestido de novia muy feliz mirándome y esperando mis palabras, que podía decir? que era lo que necesitaba decir a los novios? más que...
Mire a Zeus, él estaba mirándome sonriéndome, y se me ocurrió una idea.
-Saben? - comencé mi discurso improvisado
-Entiendo a mi prima, entiendo lo que es estar enamorado, estando con la persona que amas- decía mientras miraba a la audiencia, pero pensando el Zeus.
-La entiendo, sé que ella es feliz estando de la mano con la persona que amas, se lo que es abrazarse de la única persona que te hace sentir lo que nadie más, se lo que te rodeen los brazos de esa persona, se lo que es un beso sincero, dulce y que hipnotiza-
Después mire a ver a Zeus
-Se lo que es el amor- después mire a los novios -y que suerte que tanto yo como mi prima, haya encontrado a alguien que la complemente... que suerte...-
Todos me aplaudieron y pasaron el micrófono a alguien más.
ZEUS
Después de eso, ya un poco más noche, la fiesta se extendió, yo y David paseamos por el jardín, lo tome de la mano tocando el anillo de promesa que una vez le había dado, hace un año, todavía no cambiaban mis sentimientos, de hecho habían crecido.
-Oye David- el me miro atento mientras continuábamos caminando entre las flores -Tú te imaginas una boda así, es decir, de los dos?- no pude evitar sonrojarme, que pena me daba.
-Mmm la verdad no se Zeus, creo que sería como este jardín, no sé, algún lugar muy hermoso-
Yo sonreí imaginándome casándome con él en la playa, ambos vestidos con un traje blanco. Ambos nos sentamos en el pasto mirando el cielo abierto, las estrellas se veían muy bien a pesar de la luz del salón
-En algo tuviste razón David- recordando el mini discurso que dijo -Que cosa Zeus?- yo mire el millar de estrellas en el cielo -Tuvimos mucha suerte de conocernos, de tanta gente en el mundo, nos conocimos-
Él y yo nos acercamos para darnos un beso muy tierno, un beso que nos conectaba.
-Disculpen chicos-
Nos interrumpió y me hizo dar un saltito hay sentado, que susto, no vimos llegar a la prima de David y su novio -Son novios?- pregunto el novio, yo y David nos miramos, ya era tonto negarlo, nos había descubierto, no quería contestar, quería que David contestara puesto que era su familia.
-Sí, lo es, Zeus es mi novio y lo amo- Esas palabras, por fin, David le había dicho la verdad, el novio, Rodrigo agacho la mirada y yo estaba esperando algún comentario homofóbico o un sermón católico de la biblia.
-Que gusto chicos, hacen bonita pareja-
Fueron las palabras del novio, yo y David nos quedamos impactados, nos estaba felicitando?, creíamos que era homofobo, pero nos habíamos equivocado.
-Creímos que...- el sonrió -Era homofobo? por ser católico?- se le esperaron unas risitas.
-No, dios nos ama a todos- Ese comentario nos puso felices y cómodos a David y a mí, lo habíamos juzgado mal, que error de parte de nosotros. Y el continuo hablando
-Dicen que la forma más pura en la que se manifiesta dios en nuestras vidas, es en forma de amor-
Yo y David no éramos religioso pero agradecíamos sus palabras -Gracias- había gente muy abierta de mente que aun siendo religioso no nos juzgaba.
DAVID
-Zeus no para!-
Ya casi todos los invitados se estaban lleno y quedábamos muy pocos, yo y Zeus seguíamos en el jardín, solo que Zeus me estaba llenando el rostro de pétalos de margaritas blancas.
-Zeus que se me meten en la boca!- el son sus sonrisas maliciosas des hojeaba las margaritas llenándome el rostro de pétalos de margaritas -Que te calles- me decía.
Después, yo recostado en el pasto lleno de pétalos blancos, él se acostó junto a mí comenzándome a besar.
-Zeus, estoy muy enamorado de ti, mucho, no tienes idea de cuánto, te amo tanto, que hasta duele-
Los besos de Zeus llenaron mis mejillas, mi nariz, mi frente, mis labios y mi cuello.
Los besos de Zeus sabían a pétalos de margaritas.
El amor era parecido a una flor, una vez me lo contaron, primero nace de una semilla, este amor se tiene que regar y cuidar para que crezca y florezca, y una vez así, los pétalos soltaran un aroma embriagante, que deseo y locura.
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