CAP.26

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Los días pasaron rápidamente entre ajetreados días de mudanza, Marinette todavía estaba incrédula.

¿Esto realmente sucedió? Algo que ella siempre había soñado desde que tenía quince años finalmente era realidad .Este era su primer día en su nueva casa.

Como si la llamada telefónica de su madre sollozante y su orgulloso padre mientras la felicitaban pareciera ser parte de un sueño.

¡Si un mes atrás alguien le hubiera predicho estos acontecimientos , sin duda hubiera pensado que estaba loco!

Demonios, ella estaba casi convencida de que era un sueño.

Adrien no le dio tiempo para comprenderlo, en cuestión de horas se fue de nuevo, y Marinette no le prestó atención a dónde fue, Justo en ese momento todo lo que llamo su atención fue el peso extra en su dedo.

Se sentía como una reina, de vez en cuando veía un destello, y eso la hací enloquecer. Ella no podía dejar de mirar su anillo.

Ella siempre había sabido en el fondo que era suya, y él era de ella, pero esta sensación de logro era algo diferente de lo que ella podría haber imaginado.

Todo el mundo lo sabría, toda la ciudad reconocería a Adrien como su esposo, y pronto tendrían el documento que validaría su amor ,  algo que había soñado desde el primer momento en el que se enamoró de Adrien, además de la inesperada bendición que llego a sus vidas ,Louis, por supuesto.

Marinette apenas podía oír a Alya divagando a su lado sobre la nueva casa que Gabriel les había dado, y ella podía oír débilmente la T.V que había encendido para mantener a Louis ocupado.

— ¡No puedo creerlo! ¡Estoy tan feliz por ti, niña!— Alya menciono a su lado, el suave timbre de su voz finalmente sonó en los oídos de Marinette sacándola de su prolongado trance de satisfacción. 

—Para ser honesta ... yo tampoco lo puedo creer— Ella murmuró, sus ojos azules mirando hacia arriba para ver el cuerpo de Louis balanceándose al ritmo de su canción favorita.

—No estoy soñando ... ¿verdad?—Ella miró a Alya, con un ligero aturdimiento. Marinette podía sentir a Tikki retorciéndose en su bolsillo, lista para salir y celebrar. A pesar de que Alya sabía sobre su identidad como Ladybug, no quería abrumarla con la presencia de Tikki. A Marinette le preocupaba que fuera más confuso para Louis, y le preocupaba que Louis posiblemente le dijera a todos sus compañeros de clase que ella y Chat Noir eran sus padres.

Esa fue una pequeña idea de charla sobre la que Marinette hizo una nota mental para hablar de ello con Louis cuando fuera mayor.

—No lo se , talvez esto puede aclarártelo ...— Alya se acercó para agarrar la mano de Marinette y se la acerco directamente a la cara para que el anillo brillara justo frente a sus ojos .

Marinette suspiró, mirándolo, dejando que todo lo asimilara.

—Creo que voy a llorar —Marinette habló, su voz temblorosa, algo que no había querido o no pretendía hacer , pero era inevitable.

Alya se rió entre dientes y se apoyó en Marinette.

— Yo también, niña—   

Marinette parpadeó para alejar algunas lágrimas que amenazaban con fluir por sus mejillas sonrosadas y sollozó ligeramente.

Ella cerró los ojos y se apoyó en su mejor amiga. Ella sonrió levemente y respiró profundamente.

—¿Alguna vez pensaste en llegar a esta etapa con Nino? Casarse ... formar una familia ... o como ... ya sabes ... al revés, ¿cómo lo hicimos Adrien y yo?—Preguntó, tratando de aligerar el estado de ánimo, pero luego se encontró sonrojada por la vergüenza.

UNA NUEVA VIDA JUNTOS -ADRINETTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora