Hace unas horas podía asegurar que la persona que le envio las rosas a Gabi era el maldito de Ignacio y que no se detendria pero eso ya todo cambio. Ahora no estoy seguro de nada.
Cuando llegue a casa de Gabi me dormí justo a ella en el sofa mirando una pelicula en la cual cantaban y los amigos de Gabriela estaban muy interesados. Al despertar eran las seis de la mañana y mi celular no dejaba de sonar. Me levante y en la pantalla aprecia diez llamadas perdidas de Maikes. Eso me asustó, si llaman tantas veces era por que el y sus investigadores encontraron algo.Salí hacia el patio trasero y llame a Maikes
- Maikes dime que lo hallaron y que le han dado su merecido ese maldito.
-su majestad. Por eso lo llame. Lo hallamos pero no de la forma en que queríamos. Y si, alguien le dio su merecido pero no fuimos nosotros.
-de que me estas hablando Maikes.
-lo encontramos por el aviso de la policía. Le dispararon una bala en el abdomen señor.
Eso era imposible. Ese imbécil fue capaz de golpear a uno de mis guardias por el solo echo de que coqueteó con Gabí.
Un guardia entrenado por el ejército para proteger a la familia real. El no podía haberse descuidado tanto como para que un delincuente lo matase.
-no cree que fue asesinado por un delincuente ¿verdad?.
- no. Creo que hay algo mas detrás de esto.
-¿detrás de que?
Voltee y ahí parada en el marco de la puerta estaba ella.
Tenía que advertirle de mis sospecha pero ella me hizo señas para que no dijera nada.
-si es aserca de tu sabes que.. No me lo digas. Tengo que ducharme y luego acompañar a Carrie a peinarnos y maquillarnos.
La aserque a mi y ella me rodeo con su brazos.
-okey... Pero señorita Rodrigez ¿usted me esta invitando a la ducha?
Por favor di que si.
- lo que en verdad deseo es que me hagas el amor.
Susurro rozando nuestro labios. Cuando quise unirlos ella se alejo.
-pero se me hará tarde. Dame un beso.
La bese y no tarde ni un minuto para llevarla detrás de un árbol y comenzar a sacarle su blusa. Pero como si tuviera una maldición Carrie aparece y se lleva a mi chica a rastras mientras que ella va haciendo puchero.
Bonita como te amo.
Estoy colocandome el esmoquin para ir a una boda simple. Con la mujer que amo.
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Si yo no fuera lo que soy tal vez esto seria todo un lujo para mi. Pero ahora solo puedo pensar en la muerte de Ignacio.