Drabbles Wigetta

-Fiesta en Argentina- *ESPECIAL*

¿Recuerdan la fiesta que hicieron en Argentina? Samuel estaba enfermo y luego de esa fiesta se fue, de esa misma es la que se trata el drabble. Como siempre, esto es ficción, tonterias que se me ocurren en mi cabeza :'

Algo para tener en cuenta, este drabble tiene partes que a lo mejor no todos le guste leer, no es nada sexual, es todo lo que va antes, pero meh ahí decides si quieres leer eso o no.

A LEEEEEER, lo hice un poco largo en comparación a los otros pero que lo disfruten tanto como yo! ;D

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Narra Willy.

Pues tal vez el cambio de horario no me hizo tan mal, en aquel momento seguro estaría durmiendo con la ventana semiabierta al estar en otro tipo de clima, en otro tipo de lugar... pero aquí, en Argentina era de noche y estaba a tope con las energías por el cambio de horario, agradecía no tener sueño esta ocasión.

Era una fiesta, en la cual estaban todos los Youtubers, donde sin importar quien, todos los verías con alguna cámara para grabar lo que hacían y luego editarlo como cualquier otro. Pues sin más me estaba preparando la ropa en mi habitación, tampoco tenía que deslumbrar mucho, qué mas da tío, que todos eran mis amigos allí y los que no, pues estaban a su bola alejado de nosotros.

Derramé un poco de agua sobre mi mano, se me cruzó por la cabeza lo que los hoteles nunca dejan que te tomes el agua de las canillas, siempre tienes que comprar las botellas y demás. Y justo en ese momento, sonó la puerta con un toque de delicadeza, como si fueran tres golpes que formaran un ritmo de alguna canción clásica.

—¿Quién es?-dije sin apartar mi vista del espejo.

—Tu bestia parda.-se escuchó detrás de la puerta, no cabía duda que aquel tonto era Vegetta.

Derramé el agua de mi mano sobre el lavabo, pero no encontré la toalla rápida, así que salí corriendo a abrirle la puerta, que Vegetta seguía haciendo sus toques sobre la puerta y se volvía muy pesado.

—Tu bestia parda, que vas a partir la puerta como sigas golpeándola.-abrí la puerta, pero solo un poco dejando ver solamente mi cabeza.

—Abre tío, ¿estás desnudo?-dijo Vegetta que buscaba con sus ojos partes de mi cuerpo, que no conseguía porque solo se veía mi cabeza.

—Ostras, ¿y esa voz?-dije riéndome en su cara, que él estaba enfermo- ¡que pareces un adolescente cambiando su voz!- y ahí eché a reírme, él solo sonreía y se hacía el ofendido.

—¡Chaval! y me seguiré enfermando más como no abras la puerta-dijo en su tono desafiante- Willy que si estás desnudo pues que te des prisa macho.

-Pues podrías ayudarme, ¿no crees?- abrió sus ojos como platos al escucharme decir eso-... a empacar el resto de ropa.- Su sonrisa no hizo más. -Tienes unas cosas Vegetta...

Abrí la puerta y empezó a reírse cuando me vio ya vestido, le dejé pasar, me di la vuelta para seguir con lo que estaba haciendo... de no ser, por él y sus cariños repentinos, que Vegetta pasó sus brazos por detrás de mi, uniéndolos justo por encima del ombligo y me abrazó.

—¡Tío que susto!-dije porque aquello fue tan rápido que ni me lo esperaba- ¡suéltame Vegetta!

—Me lo debías, que me dejaste solo como un perro en todo el vuelo, y la tarde.-dijo como metiendo excusas para abrazarme, con su típica voz en esas situaciones.