Se repuso increíblemente rápido. O al menos, fingía estar de maravilla. Y le salía tan bien.
Nunca antes vio a Yayo tan concentrado en arreglarse por su encuentro con alguna chica, nunca. Eso la deprimía todavía más. Solo la dejaba pensando que seguro esa chica era tan importante que hacía que el chiapaneco se comportara de esa forma.
Estaba hojeando una revista en la sala cuando escuchó el timbre de la puerta sonar. Apareció un Yayo Gutiérrez apuradísimo a abrir la puerta, vestido con un pantalón de mezclilla, camisa blanca y saco negro; su cabello pulcramente peinado hacia atrás.
"Se ve bastante guapo"; pensó. Pero ignoró eso cuando el mayor al fin abrió la puerta. Y como quien no quiere la cosa, miraba de reojo para lograr ver a la susodicha.
Al entrar, la famosa novia de Yayo lo saludó con un pequeño beso en los labios. Se le retorció el estómago.Se trataba de una joven un poco más alta que Alex, cabello negro y ojos café. De verdad era muy guapa, pero para Strappa, no era la gran cosa. Era eso, o el virus de los celos ya lo tenía metido hasta la médula. Si, probablemente se trataba de lo segundo.
Después de saludarse con su respectivo novio, la recién llegada se acercó a Alex, con una sonrisa en la boca y la mano estirada.
-Hola Alex, Yayo me contó de ti y... tu situación. Sé que eres su gran amigo... quiero decir amiga. Soy Kendra, y espero que nos llevemos muy bien.
¿"Tu situación"? ¿Qué mierda quiso decirle con eso? Osh. Ya comenzaba a caerle mal y era apenas el inicio. Aun así, le dedicó la sonrisa más hipócrita que tenía y estrechó esa mano con "cariño".
-Oh querida, estoy segura que nos vamos a llevar muy bien. Después de todo, eres la novia de Yayo el gallo.
Lo siguiente que se escuchó fue una risotada de la pelinegra. Y un Yayo echándole miradas matadoras a su amigo.
-¡Jajajajaja! ¡El gallo! No sabía que te decían así, Eduardo.
-Jejejeje, bueno, ya ves las ocurrencias de los amigos... - Al parecer esta era doble hipocresía de la que aplicó Strappa.
Cuando la joven dejó de reír, brincó emocionada porque tuvo una brillante idea, según ella.
-¡Tengo una brillante idea, según yo! Amor, ¿recuerdas que íbamos a pasear a six flags, verdad? - El mencionado asintió con la cabeza. -¡Pues llevemos a Alex!
Ambos, "Alejandra" y Eduardo abrieron los ojos como platos. Por sus distintos motivos, ninguno de los dos estaba de acuerdo con eso.
Strappa definitivamente no quería estar en un lugar donde sería una cita DE DOS, y menos cuando se trataba de estos dos. Eso era masoquismo, y afortunadamente ella no padecía de eso. Además, ¿qué es eso de "llevemos a Alex"? ¡Ni que fuera un maldito perro!
-No. Definitivamente no. Kendra, es nuestra cita, NUESTRA. Además, créeme, no quieres a Alex en nuestra cita. - Reaccionó pronto el mayor, muy seguro de sus palabras.
Ya acábame de matar... Obviamente esas palabras le dolían en demasía a nuestra queridísima youtuber. Pero también, la emputaban como nunca antes.-Si. Estoy con Yayo. No me quieres ahí, yo solo les opacaría su salida con mi singular belleza.
La novia volvió a reír. Era un hecho que Strappa solo necesitaba abrir la boca para hacerla reír. Vaya.
-¡Jajaja! ¡No! ¡Yo insisto! Alex va porque yo digo, o si no, no hay cita amorcito.
"Y por eso, Dios no existe." Ese solo fue un pensamiento del chiapaneco en su estado de hinchazón de bolas total.

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Strappa
Fanfiction¿Sabes cuantos accidentes puede causar una cáscara de plátano? De todos los escenarios imaginables el menos probable le ocurrió a Strecci. Romperse la cabeza con un mueble, y despertar con la ferviente idea de que es una chica y que se llama Strapp...