Lia

Me siento rara,¿Quizá sea la culpa?
          Por supuesto que es eso,¿Y como no?!! Si realmente la cagué, cabrón. Hice una tremenda estupidez, la hice.
          Contarle no es un opción,no lo es.
          Realmente me siento mal,no puedo con tanta culpa,no puedo con este pecado que me come día a día,que lo pienso y me quiero agarrar a llorar.
          No me he valorado,no me amo,soy una tremenda estúpida.

Bueno al último no,me aburrí ya

Lo intenté,voy a pecar

Ahí estaba pecando otra vez 
          con mis pensamientos, 
          mis deseos más pecaminosos 
          querían un acostón con él.  
          
          Había jurado no caer en la 
          tentación, 
          pero esa noche mis instintos 
          lujuriosos estaban a flor de piel, 
          con muchas ganas de comérse 
          a ese hombre completo 
          y sentirlo de nuevo agitado 
          en mi cama y enloquecido entre 
          mis piernas.
          
          Ansiaba sus manos sobre mi 
          piel recorriéndome de pies 
          a cabeza;
          deseaba mi cabello mojado de 
          sudor bailando sobre su torso 
          al ritmo de mis caderas.
          
          Estaba en esa lucha interna si 
          portarme bien o portarme mal,
          si ser decente o indecente, 
          si quedarme con la ropa o quitármela
          delante de él,
          si olvidarlo por completo o ser
          otra vez su mujer.

Hola linda.
          ¿cómo estás?

Alto giro que lleva ahorita mi vida 

Ya déjame en paz,¿SÍ? de dije NO y es no. 
          Superarame,porfi.
          ERES UNA MALDITA ACOSADORA, PSICÓPATA!!!!

Maldita loca que eres,toda trastornada al igual que él.

Me deje llevar por mi deseó y la tentación, adiós.
          Ya perdí ante él,de nuevo 

No me reconozco ahora