Que lindo es todo, que lindo es el mundo, el cielo nocturno, la lluvia, la naturaleza, sus ojos, los días fríos, su sonrisa.
Ni hablar de lo satisfactorio que es escuchar crujir las hojas secas de otoño, tu canción preferida, su voz, las gotas golpeando el pavimento, su risa.
Me perdí un poco en la narración pero que importa