Peor que una prisión diría yo, es como estar en Arkham…si es que alguna vez llegase a estar. Aunque estoy a nada de pegarme a ti como un koala y mantenerte en mi habitación por siempre. —sonrió ampliamente, abrazándolo con un poco más de fuerza.—
Oh, si, ya sabes como es Alfred, aunque le digas no tener hambre siempre te prepara un plato, ¿y tú? ¿no te has sobre estresado? Eso suena maravilloso, dile a las plantas que no te comparto…o mejor no, no quiero caerles peor. —una pequeña risa salió de sus labios, suspirando levemente mientras negó con suavidad.—