NARNIA/Edmund Y Tu (sin corregir)

Capitulo 23

La primera idea de Caspian fue atacar esa misma noche las reservas de armas de los Telmarinos en Veruna e incluso retrasar un poco la construcción del puente. Todos partimos hacia Veruna mientras el cielo se ponía más oscuro con la noche

Primero pasé volando con dos grifos para ver que todos estuvieran dormidos y así era, excepto por un par de guardias. Solté un grito de águila indicando a Caspian que podía atacar. El entró en combate con un grupo de Narnianos, abrimos las reservas y sacamos las armas necesarias, los centauros tomaron unas cuantas bolsas con espadas dentro de ellas, los grifos se llevaron unas maquinas para afilar las espadas y yo me llevaría a Caspian

- Todos salieron del campamento sanos y salvos - dije acercándome al príncipe que hacía unos detalles con su espada sobre la madera donde estaban depositadas las armas - ¿que estas haciendo?

- Les dejo un recordatorio - dijo riendo mientras leía su marca sobre la madera, rodee los ojos y me convertí en un grifo dejando que Caspian se montara en mi lomo y ambos salimos del campamento

Al llegar al refugio de los Narnianos, dejé que se bajara de mi lomo y me convertí nuevamente en híbrida

- Caspian - lo llamé antes de que entrara - tu comandaras unos grupos de búsqueda

- ¿Búsqueda? ¿Que están buscando? - pregunto mientras entrábamos al refugio. Lo llevé al fondo del lugar donde habían unas pinturas que descubrí divagando

- Cuando tocaste el cuerno de la reina Susan no solo me llamaste a mi - dijo caminando, llegamos a las paredes con unas pinturas de los reyes de antaño y la leyenda sobre la recuperación de Narnia a la libertad - también llamaste a todos los reyes de antaño - le señalé los dibujos donde estaba los hermanos Pevensie

- Así que de verdad existieron

- No existieron - dije mirándolo - existen, y al igual que yo no tienen conocimiento de lo que sucedió en Narnia, por eso los buscamos, para ayudarlos y que vengan sanos y a salvos

- ¿Quieres que te ayude a buscarlos?

- Si

- Lo haré - dijo con seguridad - porque me permitiste tomar el mando contigo, te lo debo - sonreí ante su respuesta - ¿como los identifico?

- Hace más de cien años, tres de los reyes y yo fuimos visitados por el hombre de la Navidad, el nos entregó objetos muy específicos y de mucho valor. Al rey Peter le entregaron una espada plateada con el símbolo de Aslan dorado en la empuñadura y un escudo plateado con un león rojo de decoración. A la reina Susan le entregaron el cuerno que llevas contigo, un arco blanco y unas flechas con las plumas rojas. A la reina Lucy le entregaron un cuchillo y la única poción de curación que existe en todo el mundo. A mi...

- Te entregaron cuatro cosas - completo mi oración - tu espada, tus arco con las flechas, el collar que solo muestras las imágenes de los que se ganaron tu corazón y confianza y los anillos del amor eterno y puro

- Sabes, empiezas a darme miedo con lo que conoces tanto de mi - dije mirándolo

- Cuando era un niño, pensaba que tu eras mi heroína - dijo de repente - simplemente eras valiente, generosa y audaz

- Por algo tengo el titulo de Audaz príncipe 

- Y los anillos, ¿son reales? dice la leyenda que son los más poderosos jamás creados - Levanté mi mano mostrándole el anillo de mi madre - ¿y el otro anillo?

- Lo tiene el rey Edmund, el se gano mi corazón y por ello le entregue ese objeto

- Tu esposo ¿verdad?