Amor Sin Límites || Diego Laínez y Edson Álvarez (Adaptada) ✓

Capítulo 14 || Amor sin Límites

Me enganché en su beso y empezó a acariciar mi espalda mientras yo le quitaba la camisa, acariciaba mi rostro tan suave, acaricio su pecho, que bien lo siento, él besa mi cuello, nuestras respiraciones comienzan a agitarse... rodamos en la cama, él encima de mi besando mi cuerpo, besándome tan suave pasando su lengua por mi estomago, nos despojamos de lo que quedaba de ropa... no sé que estoy haciendo, pero no puedo pensar ahora. Se movía dentro de mi, lentamente, poniendo mis manos a la altura de mi cabeza y entrelazando sus dedos con los mios; lo único que hago es cerrar mis ojos y disfrutar de este momento, ya mucho mal rato tuve hoy con ese idiota de Diego. Seguía besándome apasionadamente mientras yo me aferraba a su cuello y lo mordía sutilmente.

— Eres hermosa -me dijo al oído, yo solo sonreí para después arquearme y sentir que se tensaba dentro de mi.

Esa noche nos dormimos juntos, abrazados, él cruzando su pierna sobre la mía. Lo que primero me pareció una locura ahora me parece algo lindo y tierno, me refiero a que Edson y yo hemos compartido una habitación durante 5 años y nunca se me había ocurrido terminar haciendo el amor con él.

08:56 AM

Edson y yo seguíamos durmiendo, en realidad yo no lo estaba... pensaba en como pudo haberse escapado Diego si todo el lugar estaba plegado de policías; pero en realidad lo que me inquietaba era lo que pasó por mi cuando me hablaba tan cerca, cuando me tocaba... debí haberme puesto como loca pero no... ya quiero que se vuelva a aparecer para verle la cara y quitarme las dudas de esto que me pasa.

Edson tenia su mano en mi cintura entrelazada con la mía, cuando mi celular sonó en la mesita de luz. Me fije y decía llamada oculta, sospeché de que podía ser Diego, así que me levanté, me puse la camisa de Edson y sin hacer ruido salí a la terraza.

— ¿Qué mierda quieres? -dije furiosa, estaba segura de que era él.

— Mmm... que manera de atenderme muñeca, ¿qué pasa? ¿te levantaste de mal humor? -dijo entre risas.

— Si, por que no pude atrapar a un maldito hijo de perra -dijo irónicamente.

— Oh, entonces debe ser que ese hijo de perra es mas listo que tú ¿no crees? -dijo burlonamente.

— Mira Laínez, sé que te atraparé, no pararé hasta verte pudrirte en la cárcel -dije furiosa.

Volvió a burlarse.

— Eso lo veremos, preciosa -dijo con voz sexi. -oye ¿quién era ese tipo que me habló por el handy anoche?

— No te importa. -dije fría.

— Pues parecía muy interesado y preocupado por ti -dijo refiriéndose a Edson- espero que no se interponga en mi camino -dijo amenazante.

— ¡Vete a la mierda! -le grite al teléfono y colgué.

— ¿Qué sucede? -era Edson, estaba detrás de mi sin remera. Me gire y le sonreí rápidamente.

— No, nada, todo bien -dije acercándome a él y sonriéndole, me besó tierno en los labios agarrando mi cara con ternura.

— Iré a preparar el desayuno -Dijo chocando su nariz contra la mía y besándola.

Me reí.

— Deja que esta vez yo lo prepare -dije tomándolo de la mano y entrando de nuevo.

Mientras yo preparaba el desayuno Edson no dejaba de mirarme, parecía que nunca me había visto o algo así.

— Deja de mirarme -dije sirviéndole el jugo.

— Es que te queda muy bonita mi camisa. -dijo mirándome de pies a cabeza.

— Ah, ¿si? pues qué bueno que lo pienses así porque no pienso devolvertela -dije divertida.

Ahora nos tratábamos diferente, creería yo que empezaba a sentirme bien estando de esa manera con Edson.

Corregido ✅