Vegetta y Willyrex...¿que podría pasar?

Capítulo Final

~Narra Willy~

Solo podía ver como el avión despegaba, veía cómo la única persona que de verdad he amado se alejaba de mí. Mis ojos estaban rojos y cristalinos....pero tenía una sonrisa en mi boca. Supongo que jamás se irá de mi lado mientras mi corazón siga latiendo igual de fuerte cada que pienso en ella. 

Salí del aeropuerto y me dirigí al auto, no es que tuviera algún lugar al cuál ir, sino que solo quería despejarme, quería llenar esta soledad que apareció repentinamente. 
Solo conducía...sin rumbo, sin un destino, solo guiándome por mis instintos. Extrañamente llegué a un colegio hermoso, era muy elegante. No sabía porque este lugar había llamado mi atención. De pronto una luz en mi cabeza se encendió "El colegio donde estuvo Ilina". 
Abrí la puerta del auto y comencé a caminar hacia las instalaciónes. Era un edificio moderno, con muchas ventanas y color marfil, todo estaba rodeado por un jardín hermoso con algunos árboles muy bien cuidados. 
Decidí dar una vuelta alrederor ya que sería imposible que me dejaran entrar sin un buen motivo y llegar y decir "Es que mira, en este colegio estudiaba una amiga y quiero entrar" no me parecía una historia muy creíble. 
Observaba todo, incluso podía imaginarme a Ilina recorriendo este jardín con su hermosa sonrisa, saludando a todos de forma amigable y tal vez leyendo un libro. Una risa se escapó de mis labios al darme cuenta que hablaba de ella como si se hubiera ido hace años. 
Unos metros más adelante de mí había una mujer vestida muy formal, con un traje negro entallado y unos tacones un poco altos. La mujer veía a la nada con una cara de tristeza que hacía sentir mal a cualquiera y parecía estar fumando.

-Disculpe, ¿está bien?-. Pregunté por cortesía. La mujer me miró detenidamente y soltó un bufido. 

-De todas las personas que pudieron venir tenías que ser tú-. Comentó con ironía. Me limité a permanecer callado aún cuando tenía muchas preguntas. ¿Por qué actuaba como si me conociera? Jamás había visto a esa mujer en mi vida. 

-Solo quería saber si podía ayudarla, perdón si le causé alguna molestia-. Dije educadamente; antes de que pudiera dar un paso ella me miró y suspiró. 

-De todas formas ya no tengo nada que perder-. Dio una última calada a su cigarrillo y lo apagó. 

-Vendí mi alma para cobrar venganza a tu "amiga" Ilina, yo era su maestra y alteré sus calificaciónes para que la enviaran de regreso a México. Yo era la voz que escuchabas, te manipulé e hice que Ilina se sintiera insegura y miedosa sobre muchas cosas. Se supone que cuando cumpliera mi cometido recuperaría mi alma pero parece que algo no funcionó-. Me quedé paralizado al escuchar esas palabras, ¿Qué tipo de droga consume esta mujer?. Pero si lo pensaba bien: Conocía mi nombre y el de Ilina, sabía lo que había pasado con la voz en mi cabeza...¡pero eso no tiene sentido!
La mujer esperaba una respuesta de mi parte. Ordené todas las preguntas que había en mi cabeza por importancia. 

-¿Acaso es posible vender el alma?-. Pregunté haciendo que mi voz sonara calmada. 

-Cuando tu odio sobrepasa los límites todo es posible-. Contestó.

-No te creo nada-. Respondí seco.

-¿Sabes que es totalmente estúpido? Que la gente busque soluciones mágicas a sus problemas pero que no crean en la magia-. Dijo mirándome fijamente y con dureza. Decidí solo seguir el juego.

-¿Por qué odias tanto a Ilina? ¿Qué fue lo que te hizo?-. No es normal odiar tanto a una persona y menos a alguien como Ilina, no entendía la razón del porqué llegó tan lejos. 

-Yo antes era amiga de Ilina, pero todo se fue al diablo...¿Conoces a Carlos verdad?. Yo estuve enamorada de él durante años. Él no solo me gustaba, yo lo amaba; tanto que si él me hubiera pedido matar a alguien lo habría hecho, Joder, ¡si él me hubiera pedido acuchillarme a mi misma lo habría hecho!. Carlos era mi razón de vivir, siempre lo seguía y miraba con quien hablaba...para protegerlo. Si algo le pasaba me hubiera muerto. No. Mejor dicho, los que le hubieran hecho daño hubieran muerto.
Ilina lo sabía, sabía que amaba a Carlos y yo creí que me ayudaba para que fueramos novios. Ilina era la única amiga que me quedaba, todas las demás creían que  mi amor era algo "enfermizo", todas se fueron pero Ilina se quedó. Durante la secundaria ellos se hicieron muy buenos amigos, me hicieron sentir excluida...ahí fue cuando entendí todo: Ilina siempre me odió, ¡Ella era igual a todas las demás! Quería a Carlos para ella. En ese momento decidí venir a Madrid para alejarme de ellos.
Después de un tiempo supe que ellos también habían venido. Los dos juntos. Esa fue la chispa que revivió mi odio e hice un pacto apostando mi alma, " El día en que la persona que me tracionó pruebe el sabor del dolor será el día en que mi alma me sea devuelta" A cambio recicbí el don de manipular a Ilina y a la persona que ama, también otras habilidades para facilitar mi tarea... Pero como dije, algo no funcionó bien-. Mi cerebro estaba procesando todo. Y de pronto una furia recorrió mis venas.