El Príncipe Azúl © - Anayhallyfriends
Es fácil robar la cordura. Los silbidos se convierten en el llamado de los lobos. ¡Despiértame y tráeme a la luz! Las sombras me persiguen, no dejes que me atrapen. ¡Duérmete para salir a la luz! ¿Te enamorarías de la demencia? ¿ Quién pinta los ríos con acuarelas abstractas y carmesí ? ¿ Quién acaricia personas dañi...