hace mucho no escribía aquí, pero siempre vuelvo a donde creo sentirme seguro donde nadie me juzga y me conoce.
me es raro pensar que estoy planeando irme de mi casa con mi hermana y poca gente lo sabe, juntar dinero me pesa porque siempre quiero algo pero hoy supe el total ahorrado, saber que estoy cada vez más cerca de lograrlo me llena de un sentimiento raro, casi reconfortante.
me parto la espalda en un trabajo que no me gusta, rodeado de gente que me juzga por mi neurodivergencia, sé que todos los trabajos son así; en especial en atención al cliente.
podría jugar a sentirme como una víctima, ¿está mal sentirme mal, aún cuando todo lo hago bien?
empecé a jugar el life is strange 2 por primera vez desde que supe del juego, es un sentimiento increíble jugar todo por mi cuenta, aquello que mi yo de quince años anhelaba lo tiene ahora; tengo todo lo que alguna vez anhelé, ahora me falta lo que antes me sobraba; tiempo.
solo espero pacientemente a que llegue el día en el cual me convierta en estudiante de mi carrera soñada, ahora soy y sabré en su momento que todo este cansancio y sacrificio valdrá la pena, lo sé desde el primer día en el que empecé a trabajar.
la vida será diferente en un estado diferente, donde los estados no se diferencian, donde la vida diaria sucede de noche también, será diferente a cuando era un adolescente y tenía 18 años, será diferente cuando tenga 20 y viva ahí y haga de mi hogar aquella ciudad rodeada de mar. siempre me gustó el mar, me gusta pensar que todo lo que llega a él se va, me gusta lo profundo y hermoso que puede ser, habita tantas cosas maravillosas y refleja el cielo, me llena de esperanza. aunque no es lo mismo que mi ciudad natal, todos los días son los mismos aquí en el pequeño pueblo cercano al mar, y el cual me recuerda mucho al primer life is strange, bueno, y también sacrificaría mi pueblo costero por una punketa.
