Mhm, solo no quería estancarme... No me cierro a retomarlo porque me gusta la docencia, pero no en este momento de mi vida. Además, me va bastante bien en el Ministerio.
- Hubo un silencio por algunos segundos, y aunque Rigel quería seguir conversando, simplemente no le salían palabras de su boca. -
Y, ehm... ¿sigues hablando con Lorcan?