Sipnosis

Antes de que Kumatetsu fuera maestro de Kyuuta, él antes tenía una vida y sus amigos lo sabían, Tatara; un simio que es su mejor amigo desde pequeños, y Hyakushūbō; un cerdo budista que es lo opuesto a Kumatetsu, él conoció a una humana llamada Asuna, y era la única humana que tenía unos ojos rojos como los de el, y Kumatetsu veía que unos hombres la estaban molestando y por primera vez, el cual nunca hace una bestia, fue a ayudarla y le dio una gran paliza a esos hombres que se fueron corriendo.

Asuna se sentía aliviada de que la había salvado pero ella no sabía que él no era un hombre, sino una bestia, pero no se asustó en lo absoluto, ella nunca había visto una bestia como Kumatetsu en su vida. Como Asuna no tenía a dónde ir, se decidió a acompañarlo en su mundo llamado Jūngetai, a él le molestaba un poco de que Asuna lo seguirá y que estuviera viviendo en su casa, pero al darse cuenta de lo sensible, cariñosa y que se preocupaba mucho por él, poco a poco Kumatetsu se va enamorando de ella a pesar de que es humana.

Varios meses después de estar juntos sin decirle a nadie de su relación, Asuna le cuenta a Kumatetsu que está embarazada del hijo que espera de él, y se alegró tanto que por primera vez en su vida le mostró a Asuna una sonrisa de felicidad, con todo y colmillos.

Pero su felicidad se apaga cuando un clan de bestias que es rival de Kumatetsu, su rival era Iouzen, el respetaba mucho las reglas de su mundo y como tal, tenía que llevarse a Asuna fuera de su mundo, pero Kumatetsu no se aferró a dejarla ir, el la amaba, la quería junto a él y ella era su razón de ser feliz y no le importaba nada más que estar con ella, pero nadie le hizo caso y aún así...se la llevaron fuera de su mundo, y del propio mundo de Kumatetsu, sintiéndose solo una vez más.

Al llegar a su casa, se encuentra con Tatara y Hyakushūbō que estaban rodeados de algo que los asombro, Kumatetsu escuchó un pequeño llanto de un bebe, ahora te