Prólogo

La curiosidad, el interés por lo desconocido, lo mágico y lo placentero, el deseo y la necesidad de entrar en la vida de una persona pueden llegar a ser sujetados por una frágil cuerda que lleva al vacío. Eso fue lo que pasó con Angélica Cooper. Caminó por la insignificante soga, perdió el equilibrio y cayó. Perdida por su perfume caro, sus ojos penetrantes y su porte masculino, la deportista ágil que era ella sería rápidamente hechizada por la tentación misteriosa que era él. Decidida a verlo de nuevo, Angélica entraría a un mundo completamente nuevo e inimaginable para la humanidad. Un mundo donde sus más terroríficas pesadillas cobrarían vida. Un mundo donde el único lugar a salvo sería en los brazos de un peligroso y misterioso ser inhumano. Y ahí, con los pulmones extra cargados de aire, las pupilas dilatadas y los latidos saliendo de su pecho, ella tomaría la decisión más difícil de su existencia: Alejarse para siempre o volver a resbalar hacia la imponente oscuridad.