Incipit Iter

Alejandra era miembro de la gran familia Aponte la que era muy reconocida por sus dotes musicales. Pero, para la frustracción de su padre, ella no estaba mostrando tener el mismo calibre de su familia o al menos así lo pensaba su padre. Era muy callada, reservada e insegura en sí misma. Afortunadamente, ella tenía amigos que la apoyaban y le brindaban todo el amor que nunca halló en su familia. Muy en particular en Gabriel, el rubio con su eterna sonrisa y actitud optimista que se convirtió en todo su centro. No obstante, él tenía un amigo, Rafael, que era todo lo contrario; huraño, antipático y nada social que lo único que hacía era importunarla y hacerle la vida cuadritos... hasta que un día, en un viaje fantástico e increíble descubre que esconde esa actitud hacia su persona. Y Alejandra se dará cuenta que a veces el amor puede encontrarse en lugares inesperados.