ANTES DE LEER

Cuando las diosas podían bajar al mundo mortal sin restricciones, los dragones vagaban por doquier y las hadas vivían sin problema alguno junto a la raza humana, el portal de las almas fue abierto, transformando el curso de vida de dos personas, y produciendo algo que se conoce como un fenómeno divino.

600 años después, aquel fenómeno se repetiría de una forma un poco distinta, y en el inmenso país de Stromme, dividido por cuatro reinos, dos almas, de todo menos desconocidas, se reencontraron.

Con una guerra que parece mucho más pronto por llegar y una jugada por parte de los rebeldes en contra de la monarquía de Morreau, la princesa Elizabeth se ve obligada no solo a buscar refugio en uno de los cuatro reinos, si no que también deberá contraer matrimonio con quien menos lo espera, alguien con quien ya había coincidido hace cuatro años atrás, que es el caos en persona, pero que también es mejor conocido como el rey Bastian Dubois.

Sin siquiera desearlo la princesa se vuelve a ver envuelta por la presencia de aquel rey, y con una promesa sin cumplir, ella no va a poder escapar de aquella mirada grisácea, no de nuevo, y mucho menos cuando uno de sus mayores secretos es revelado, y donde antes parecía que no existía nada más que escombros, se hace presente el levantamiento de unas ruinas llenas de secretos, miedo, engaños y algo parecido al amor.