Description
Eunice y Liliana no tenían una dinámica familiar normal. Eunice era policía desde hacía años, y aunque cariñosa y amigable, también era desconfiada y celosa; posesiva con respecto a su hija, dirían algunos. Liliana por su parte, era pequeña, débil e indefensa, una estudiante brillante con un futuro prometedor. Y de acuerdo a su madre, necesitaba de su protección para sobrevivir. Por eso, cuatro años atrás habían llegado a un acuerdo práctico y sencillo: Liliana se quedaba en casa y Eunice cuidaba de ella. No había forma de errar. El problema era que Liliana no estaba conforme con el cautiverio, o con la cadena en su tobillo o las adaptaciones en la recámara que evitaban que cualquier sonido saliera al exterior - y que su mamá no la iba a dejar irse. Jamás.