Parte 1 Sin Título

Para nadie era un secreto que entrar al bosque estaba prohibido, crecí con las leyendas sobre el lobo feroz, incluso los ancianos del pueblo le temían, nadie durante estos años que llevaba de vida había intentado sobrepasar el límite del bosque y estaba bien con eso, creo.

Y la verdad no quería mandar a la regla más importante a la mierda, pero cada que estaba frente a la valla algo me gritaba que me adentrara.
¿Por qué? No lo sabía.
¿Quería hacerlo? Tal vez.
¿Tenía miedo? Claro que sí.
Pero si algo había aprendido de la vida es que tenía que ser valiente y hacer las cosas, aunque me estuviera cagando de miedo.