La fuerza del pasado.

Hay una parte en la vida de cada persona que es inevitable, y es cuando otra persona entra a tu momentaneo instante en este plano, casi siempre no lo planeas, solo es el destino y sus cosas. Ahora, es problema de cada quien ver el como lidiar con eso y Michelle no fue la que más lo acepto, pero hay un dicho que dice "la gota rompe la piedra no por su fuera, sino por su constancia" y a Fernando se le grabó muy bien esa frase, tanto que Mich no tuvo de otra, más que aceptar a esa persona que el destino le puso en la casa de atrás.

Después de tanta indecisión, de tanto queso, después de la fama y el miedo, Michelle y Fernando logran entenderse, por fin logran aceptar que la vida no los hizo vecinos de casualidad y que las cosas pasan por algo sino no pasan.

La vida está hecha para los que se joden, para los valientes, para los que se sudan lo suyo, y como aquí somos una gente que tiene tatuada en la frente "el que tenga miedo a morir que no nazca" juntamos a dos personas que tienen eso más que claro, y bueno, que pase lo que tenga que pasar y que el amor fluya como tenga que fluir.

Más adelante entenderán porque juntar a dos personas que tienen eso más que claro es ¿Cómo decirlo? Pues sí, algo peligroso a lo que hay que tenerle sumo cuidado.