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Cuando Jin se encuentra atrapado en un hueco depresivo, decide empezar a trabajar como vigilante de incendios en el parque más grande del país. Acompañado de su perro y en diario contacto con otro compañero en la torre más cercana, espera que su nuevo trabajo pueda distraerlo un poco de la oscuridad de la que huye.
Eso es, hasta que comienza a notar extraños sucesos, nota que ciertas cosas no están bien y poco a poco duda más de su propia mente.

"Las siluetas del bosque me sonríen desde la oscuridad, resplandeciendo sus colmillos, cuando se dan cuenta que me acerco."