PRÓLOGO

Los salvajes eran conocidos por asesinar a sangre fría, por su gran vínculo con los dragones y su perfecto desempeño en batalla.

El reino de los Todoroki les ofrecían tierras por trabajar, poniendo como primera opción negociar a su hija mayor con su heredero y único hijo.

A Katsuki le gustaba ese omega que había espiado leyendo un grueso libro mientras parecía ocultarse en los jardines, no le interesaba lo que sus viejos iban a pedir, pero si la omega del reino no tenía permitido comer en la mesa ¿Qué pasaba con los omegas pobres, los niños y los ancianos? Realmente era mucho trabajo, pero como líder era un reto y una promesa hacia esa gente que permanecía en las sombras y asustados.

Él quería a Shoto como su omega, con todo el significado de la palabra.