Capítulo único.

Cuando Tanjirou los compró, los había escondido al fondo de su cajón con vergüenza y dejado ahí por los siguientes dos meses, sin volverlos a ver o tocar. Eran calcetines negros y largos, justo por arriba de la rodilla, que había tomado del departamento de ropa interior para mujeres en un arranque de espontaneidad después de una de las tantas llamadas por Skype con Giyuu. De esas tantas que los había dejado a ambos necesitados y adoloridos de contacto.

Giyutan.
⚠️ si no te gusta, por favor no lo leas⚠️
Smut🔞

NOTA: esta es una adaptación NO autorizada del O.S escrito por MissBlackCover, todos los derechos a su autora, yo solo me encargué de adaptarlo.