Aclaraciones.

- Prométeme que jamás me dejarás regresar. - dijo ella mordiendo su labio inferior, sosteniendo las lágrimas que amenazaban con salir.
- No soy capaz de controlarme, sólo te lastimaré al intentarlo. - respondió el castaño con un tono frío evitando la mirada de la chica.
- Yo te ayudé cuando nadie confiaba en ti. - su voz comenzaba a cortarse. - Yo te amé cuando todos decían que sólo me harías daño. - hizo una pausa y continuó con un hilo de voz que en cualquier momento se rompería. - Y aquí sigo, amándote, con cada latido de mi corazón. -